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Alma Vilches
@AlmaCoLatino
Danilo Pérez, director del Centro para la Defensa del Consumidor (CDC), indicó que el 16% de la población salvadoreña tiene necesidades alimentarias, por lo cual, es importante un estudio en los cinturones de pobreza del Área Metropolitana de San Salvador (AMSS), donde hay familias que no están comiendo.
“Encontramos a gente que está bajando mangos para comer, personas con cartelitos en la calle que piden trabajo y donativos de víveres, esa población ya no está solo en inseguridad alimentaria y nutricional, sino en situación de hambruna”, sostuvo.
Enfatizó que de no hacer algo, sin duda al cierre del año habrá un incremento de la pobreza en el país, las medidas más urgentes son la ayuda alimentaria focalizada, y la producción agropecuaria, sin embargo, debido al alto costo de los insumos agrícolas, los trabajadores del campo han dejado de producir millones de quintales de granos básicos
Asimismo, dijo que debido al alto costo de las proteínas, como carnes, pollo y huevo, en el país la población está consumiendo más carbohidratos, entre ellos, arroz, papas y pastas, lo cual tiene afectación en la salud con las Enfermedades no Transmisibles.
El CDC está promoviendo que en El Salvador se apruebe una Ley de Etiquetado de Advertencia Frontal de Alimentos, en los productos preenvasados con sellos octogonales, donde señale que ese producto es alto en azúcar, sodio y grasas.
Un estudio de 2017, sobre el costo de las Enfermedades no Transmisibles en El Salvador, reveló una inversión aproximadamente de $800 millones para atender estas enfermedades, que se deben al problema del sobrepeso y obesidad por al incremento en la ingesta de carbohidratos y azúcares.
“En cuestiones de nutrición, la Canasta Básica Alimentaria de El Salvador es la menos completa de la región centroamericana, además, la población paga un incremento de $51.47 por el aumento en los precios de los productos”, externó Pérez.
Detalló que el precio de la canasta básica ronda los $250, pero el salario mínimo actual no alcanza para suplir las necesidades de las familias. La falta de reserva alimentaria en El Salvador, le está pasando factura al país en el alto costo de la canasta básica.
El presidente del CDC recalcó que El Salvador no tiene una reserva estratégica de alimentos a diferencia de otros países de la región, la cual funciona comprando frijol, maíz y granos básicos a los productores nacionales a precio justo, se guarda y distribuye al consumidor final para que el precio baje.
