Si algo que ya no nos debería sorprender, recipe health por venir de donde vienen, nurse y porque ya casi nos tienen acostumbrados, ambulance es el cinismo de algunos personajes incrustados en sectores de poder.
En El Salvador, los ejemplos abundan. Pero no nos vamos a referir directamente a ellos, sino, a una gremial mundial como la Sociedad Interamericana de Prensa, que, aunque usted no lo crea, hoy “ha pegado el grito al cielo”, como se dice popularmente aquí, ante el “peligro de la concentración de los medios en pocas manos” (pag. 12, Diario de Hoy, martes 17 de marzo).
Bajo el título “SIP llama a la CIDH a vigilar la peligrosa concentración de medios de comunicación en A.L”, generada en Washington, los personeros de la SIP denuncian “la cada vez más evidente concentración de medios de comunicación en pocas manos doblegados a la voluntad de algunos gobiernos”.
La “preocupación” de la SIP, que fue expuesta en el marco del 154 periodo de sesiones de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), de la OEA, fue argumentada, por un lado, por el fortalecimiento de medios gubernamentales en países como Nicaragua, Bolivia, Ecuador y Venezuela, principalmente.
Y es que para la SIP, y esto pasa también en El Salvador, los únicos que tienen derecho a participar de la concentración de los medios de comunicación son los monopolios u oligopolios empresariales. Incluso, se han opuesto sistemáticamente al surgimiento o consolidación de los medios comunitarios y de los medios públicos.
Por cierto, a la SIP se le olvida que la UNESCO, inclusive, ha tratado el tema de la concentración de los medios, exclusivamente en manos privadas, desde hace varias décadas.
Por el ejemplo, a finales de 1979 hasta creó una comisión especial, llamada Comisión Mc Bride, para que realizara un estudio mundial de la concentración de los medios, que terminó con sendas conclusiones que llamó a los Gobiernos, del tercer mundo, inclusive, a subsidiar medios de comunicación alternativos, para equilibrar el tema de la información y para que los grupos diversos tengan acceso la producción de información.
En estos días, el planteamiento de la UNESCO es para que haya “una gama equilibrada de medios privados, públicos y comunitarios”. Para garantizar la pluralidad de voces, propone “que todo el mundo pueda tener medios: los empresarios, las instituciones de gobierno, las organizaciones sociales, las universidades”.
Es decir, la preocupación por la concentración de medios a escala mundial, regional y local es real, pero no desde quienes concentran esos medios, sino de los otros, los que solo reciben información en una sola línea y visión, sesgada, y a favor de los grupos de poder actuales. Esto significa, que la preocupación de la SIP es hipócrita, falsa y cínica.