(No. 1)
Lila Barca de Fernández, view S.R.C.
Los Orígenes y Propósitos del Consejo de Solaz
El Dr. H. Spencer Lewis fue elegido en 1915, Imperator de la Antigua y Mística Orden Rosae Crucis, AMORC, por el Consejo Supremo formado para restablecer la Organización en América para su segundo ciclo de actividades.
Desde esos primeros momentos, el Dr. Lewis pensó en establecer un Departamento de Curación para los miembros de AMORC, sabía bien que en el mundo Occidental habían existido y continuaban existiendo muchos sistemas que se atribuían los más altos grados de eficiencia en el arte de curar enfermedades físicas y psíquicas, o para resolver problemas de cualquier naturaleza. Sin embargo, los Rosacruces sabemos que el método que aplica AMORC y que enseña en sus lecciones de los grados más altos, es decididamente único y no necesita más garantía para nuestros miembros que los extraordinarios resultados obtenidos con la aplicación del mismo.
Es justo, pues, poner en conocimiento de nuestros miembros y de las personas que no pertenecen a la Orden, la magnífica y silenciosa labor de extraordinario humanitarismo que desarrolla desde hace años el Consejo de Solaz.
Muchas personas que sufren toda clase de enfermedades físicas o desórdenes mentales, acuden hoy en día, como sucedió en el pasado, a la Orden pidiendo ayuda; AMORC siempre la presta con infinito amor.
Pero, siendo la Orden una organización fraternal, obviamente ha tenido que limitar su campo de curación porque no podía ni puede exponerse a efectuar abiertamente curaciones en clínicas públicas. Sin embargo, por esa razón los grados más altos cubren el sistema completo de instrucciones sobre curación, que capacita a los miembros para prestar dicho servicio.
Es bueno que se conozcan algunos puntos característicos en las enseñanzas Rosacruces relacionados con el tema de la curación de enfermedades. Son los siguientes:
Algunos aspectos característicos
1. Los Rosacruces no condenan el uso de medicinas. No obstante, existe una gran diferencia entre medicinas y drogas. Algunos de los primeros Rosacruces fueron pioneros en el arte de curar y aporta¬ron su gran conocimiento a la ciencia de la terapéutica médica. El uso de simples hierbas y sus extractos, así como de medicinas similares, está de acuerdo con las leyes naturales, porque es indudable que la naturaleza provee muchas de las sustancias necesarias para preparar medicamentos: pero estos deben ser suministrados por un especialista en dichos estudios, así como en la ciencia del diagnóstico.
2. Los Rosacruces también aceptan la cirugía como un medio corrector de deficiencias en la naturaleza humana y saben que un hueso roto, por ejemplo, tiene que ser puesto en su lugar practicando una operación para fijarlo, de manera de “ayudar” a la naturaleza en la curación de la fractura. Saben también que si en alguna parte del cuerpo se introduce una materia extraña, deberá ser extraída. Algunos trabajos quirúrgicos pueden producir hemorragias; ese riesgo, manejado por un experto cirujano, está en total acuerdo con el pensamiento Rosacruz.
3. Los Rosacruces saben que existen cientos de enfermedades cuyo progreso puede ser controlado con nuestro método metafísico, y cientos de causas de enfermedades pueden ser curadas o eliminadas con nuestro sistema de curación.
4. En muchos casos la naturaleza (durante años de labor continua y reconstructiva en el cuerpo humano) reemplaza o vuelve a formar tejidos o partes del cuerpo que habían sido lastimados o destruidos, pero los órganos que son extirpados, destruidos o que se han atrofiado a través del tiempo, jamás podrán ser reemplazados “por la naturaleza” misma ni por ningún sistema metafísico conocido por nosotros, no obstante lo que sostienen otros sistemas demasiado celosos en sus aseveraciones.
Los Rosacruces no garantizan resultados milagrosos. Y, como se sabe, hoy en día la ciencia médica ha desarrollado métodos para reimplantar o injertar órganos en el cuerpo humano; esos sistemas lógicamente no están con¬templados dentro de las curaciones metafísicas Rosacruces y, por lo tanto, no encuadran dentro del sistema.
*Reuniones del Consejo de Solaz para ayuda por toda clase de problemas personales se llevan a cabo los sábados, cada 15 días en este Centro Cultural Rosacruz, a las 2.15 p.m. Los interesados pueden llamar también sábados por la tarde o domingos por la mañana.