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“Dasein es el Ser que en cada situación investiga y cuestiona adecuadamente” -Ref. WP- Resulta que somos la única especie en el planeta que puede preguntarse: ¿Qué hago aquí en esta tierra de indigentes?, buy de esa respuesta derivan algunas tendencias filosóficas importantes entre ellas: el existencialismo, diagnosis el materialismo, sovaldi el idealismo etc., en realidad esa pregunta da sentido a nuestra vida. Otro elemento que se une a este concepto es la “finitud”, el sentido que todo termina en cualquier momento, aunque algunos piensen que su existencia es infinita. La historia nos muestra que todo termina, incluso los imperios más elevados, las religiones, los ejércitos, etc. En el nivel individual nuestra educación nos mostró una serie de conceptos sobre la moral, el tiempo, la República, la nación, todo un compendio de instrucciones con los cuales podíamos adaptarnos a este mundo, pero la sociedad salvadoreña reñía con todo lo visible, por ejemplo nos hablaron sobre la democracia y la constitución, aquello era una caricatura, no obstante esa intemperie social fue cambiada poco a poco por la resistencia civil, ese concepto podría apegarse a “El Ser ahí” (Dasein finito), era comprender el momento “histórico”, claro algunos le llaman “historicismo”, elemento diferencial trascendente de la humanidad; pero ese “El Ser ahí” con o sin opción política era el sentido de una generación, la finitud significaba en su momento la negación del infinito, un infinito de injusticia de nuestro pueblo, una democracia en ruinas, no existían los derechos humanos –calificados de comunistas-, solo vivíamos el presente opresivo. Algunas palabras de aquella época reflejaban precisamente ese momento: “donar el cuerpo a la revolución”, “morir por la causa”, “revolución o muerte”, “vencer o morir”, es notable que el momento no evocaba la vida, por el contrario era el sentido de “finitud” el predominante, el sentido pesimista podría resumirse en: “el futuro no existe”, “no hay esperanza”, “mañana moriremos” esas expresiones reflejaron la calidad del “Dasein”; mientras algunos respondían a la inversa: “si me matan resucitaré en el pueblo -Monseñor Romero-”, “no moriremos compañeros”, “porque el que muere peleando vive en cada compañero”, aquél panorama extremo ayudó a nuestra generación a dar sentido a nuestro Ser, esa realidad era elegir una opción (filosófica) que coincidiera con nuestros actos, desde entonces fuimos un poco más humanos; en ese aspecto: el dolor, la desesperación, la injusticia, las torturas, la guerra en toda su expresión desnudó el mundo posible ante nuestros ojos, creando cuadros inolvidables y violentos. Ahora parece que el “Ser ahí” no tiene significado histórico, pero este elemento se ha transformado; ahora el desafío es la perfección de la democracia, la justicia, la destrucción de las viejas prácticas oligárquicas, ello significa una herencia negativa para nuestra sociedad. “Dasein” en nuestra sociedad es comprender, que tenemos poco tiempo para transformar la Historia, la lectura de nuestro modelo social no puede esperar el infinito, ni la eternidad, ni el fin de los tiempos para un reino de justicia, desafortunadamente no duraremos tanto. Comprender nuestro momento, al final es poseer un sentido local o temporal que otorga sentido a nuestra vida.
