Marlon Chicas
El Tecleño Memorioso
¿Cuántas veces surge la pregunta que es el ecologismo y para qué sirve? tal concepto esta referido a los movimientos sociales que alzan su voz de alarma sobre problemas de tipo ambiental en el planeta, y que actúan en la búsqueda de soluciones, que frenen el avance de la degradación del ecosistema.
Las páginas de oro de Santa Tecla recuerdan en ese sentido, la noble labor de un ilustre ciudadano que se preocupó en vida por el cuido y conservación del medio ambiente en la ciudad, el ingeniero René David Escalante Orozco (+), quien nació un 17 de noviembre 1936, registrado por su padrino como David, en referencia a su padre el Dr. David Escalante Carranza, siendo mayormente conocido como René, ya que, fue el nombre que su progenitora decidió para él. Escalante Orozco fue nieto de don Benito Orozco propietario del portal ubicado al poniente del Parque Daniel Hernández de esta localidad de acuerdo con remembranzas del licenciado Orlando Moran Castillo.
De acuerdo con reseñas de su hija Mili Escalante, su vida estuvo marcada por situaciones difíciles que lo caracterizaron por su recio carácter y fortaleza espiritual, lo que escondía una aparente jovialidad; a lo largo de su vida sorteó muchas rivalidades que siempre venció, así como a muchos enemigos que se agenció por sus múltiples actividades en las que incursionó.
A sus cuatro años presenció la muerte de su amada madre; años más tarde emigró al extranjero, debiendo regresar al país, para atender a uno de sus hijos que sufrió un grave accidente. En 1972, fue testigo de la donación de un terreno propiedad de los señores Roberto y Miguel Dueñas Palomo, que fue solicitado por el Concejo Municipal de esa época, presidido por el exalcalde José Domingo Chávez Aguilar, ubicado al nor poniente de la ciudad en donde funciona el Mercado Dueñas.
Su incursión al movimiento ambientalista inició en agosto de 1980, junto a un grupo de profesores universitarios con los que fundó el Centro Salvadoreño de Tecnología Apropiada CESTA, encargada de promover tecnología ajustada a las condiciones sociales y ecológicas de El Salvador, esta fue la primera organización ecologista en el país y una de las primeras ONGs en dicha materia.
En 1990 junto a los ecólogos Alberto Hellebuyck, y Gilberto Leonel Castillo alertan contra la extendida tala de bosques salados en las costas salvadoreñas, lo que significó la destrucción de 1,000 manzanas de mangle en la hacienda El Encantado del departamento de Usulután.
Su quehacer en Santa Tecla se caracterizó por la defensa del ecosistema en sonados casos como la Finca El Espino, temas de contaminación ambiental por desechos sólidos, así como la defensa y preservación de la Cordillera El Bálsamo. De 1998 a 1999, se opuso férreamente junto a otros tecleños como el recordado Eduardo Molina Olivares (+), a la ejecución de proyectos constructivos en la zona en mención, lo que quedó demostrado por la madre naturaleza el 13 de enero del 2001. Escalante Orozco falleció el 01 de diciembre de 2008, llevando consigo su anhelo de un mejor planeta para los seres humanos ¡Descanse en paz!