Londres/Reino Unido/AFP
Mario Balotelli volvió a la selección de Italia después de cuatro años de ausencia y es considerado un elemento importante por su seleccionador, Roberto Mancini, pero su momento de forma preocupa antes del partido de hoy ante Portugal en la Liga de Naciones.
Balotelli estuvo casi invisible el viernes en el empate 1-1 ante Polonia y fue eclipsado por Federico Chiesa, un atacante al alza y en progresión.
El delantero fue convocado por Mancini en cuanto éste último tomó los mandos de Italia, después del fracaso histórico de la no clasificación de la Nazionale para el Mundial de Rusia-2018.
Por lo visto en los amistosos del final de la pasada temporada y el partido del pasado viernes en Bolonia ante los polacos, Balotelli tiene la consideración de titular para Mancini.
Mancini reconoció, eso sí, que el estado de Balotelli es “un problema” en este momento, ya que “su nivel físico es un problema actualmente. Voy a tener que hablarle, tiene que mejorar mucho”, comentó el técnico a Rai Sport.
El jugador del Niza, reemplazado a la hora de juego contra Polonia, no participó en el entrenamiento completo el sábado. El viernes se había puesto hielo en un muslo tras su sustitución.
“Mario tiene nivel internacional, pero no la forma física en este momento. Sabía que iba a ser cambiado. Pero tiene grandes cualidades”, le había defendido ‘Mancio’.
Desde el principio, el nuevo seleccionador italiano está convencido de las posibilidades de ‘Balo’, al que ya tuvo que gestionar, con sus altos y bajos, cuando era entrenador del Inter de Milán y del Manchester City. Sus predecesores en la Azzurra, Antonio Conte y Gian Piero Ventura prefirieron no intentarlo.
Balotelli puede ser especialmente importante teniendo en cuenta que Andrea Belotti no encuentra el ritmo de su formidable temporada 2016-2017 (32 tantos teniendo en cuenta todas las competiciones) y Ciro Immobile parece flaquear cuando el nivel se eleva y no ha brillado en la selección.
No obstante, la elección de Mancini es una apuesta arriesgada, pero Balotelli tiene mejor balance que sus teóricos competidores por el puesto, 14 tantos en 36 partidos como internacionales, pero los ‘tifosi’ desconfían.
Los aficionados italianos subrayan su retraso en retomar los entrenamientos con el Niza y las dudas del jugador entre ese club y el Marsella, durante la pretemporada. Algunos ven ahí otra prueba más de la falta de madurez del jugador.