Iván Escobar
El Salvador se insertó a la economía mundial a través del Ferrocarril, a finales del siglo XIX o mejor conocido como el “siglo de la industrialización”, un hecho histórico que se registra ampliamente en los dos tomos del libro: “Entre rieles y durmientes: Ferrocarriles en El Salvador 1872-2018”.
La investigación estuvo a cargo de los historiadores Cristina García Castro e Israel Cortez Ruíz, quienes trabajaron por varios años recolectando información, visitando antiguas estaciones del ferrocarril como la del occidente del país, entrevistas a maquinistas, entre otros insumos que contribuyeron al rescate de la memoria histórica en nuestro país.
Estos elementos fueron abordados durante el conversatorio realizado en la Universidad Tecnológica (UTEC), el pasado miércoles 13 de febrero, en el cual participaron profesionales, docentes, estudiantes y público en general interesados en temas históricos.
Julio Martínez, director de la escuela de antropología de la UTEC, destacó que este es un documento importante para la historia del país, sobre todo para las nuevas generaciones interesadas en conocer el desarrollo de la nación.
El ferrocarril en El Salvador finalizó operaciones en el año 2001, cuando se realizó el último viaje comercial que comprendía San Salvador y la zona de Metapán, con el traslado de insumos de la construcción, ya que vía comercial ya no estaba activa. “El Salvador estaba incomunicado en los inicios, por ello el ferrocarril rompe con eso” expuso García.
Los investigadores plantean como causas principales de la desaparición de este medio de transporte en el país, tres situaciones: la guerra que vivió el país, la expansión de la red de carreteras, y el crecimiento de unidades del transporte público, así como otros aspectos como la falta de inversión que dejaron de potenciar este sector. Por su parte, Israel Cortez recordó que: “la visión neoliberal” contribuyó al colapso de este medio de comunicación.
El documento que consta de dos tomos, contiene amplia información sobre el origen del ferrocarril en El Salvador, su desarrollo, el aporte económico que eso significó, su declive, además el segundo de los libros contiene una historial fotográfico en el cual se puede apreciar desde imágenes, réplicas de boletos, mapas y otros insumos que permiten conocer la historia ferroviaria.
Ambos investigadores destacan que hoy El Salvador cuenta con un documento que contribuye a la historia. Además desde 2015, se inauguró el primer museo del ferrocarril, ubicado en la antigua estación de FENADESAL, en San Salvador; y en los próximos días será inaugurado un nuevo museo en la “cuna del ferrocarril”, en el occidente salvadoreño.
La investigación puede ser adquirida en la Dirección de Publicaciones e Impresos.
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