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Washington / AFP
Delphine Touitou / Heather Scott
El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió el jueves que la guerra comercial entre Estados Unidos y China hace peligrar la recuperación económica mundial prevista para la segunda mitad de 2019.
Gita Gopinath, economista jefe del FMI, refutó directamente la afirmación del presidente estadounidense Donald Trump de que los aranceles son pagados por China y dan una ganancia inesperada al Tesoro de Estados Unidos, y de que su postura agresiva ayudará a reducir el déficit comercial con el gigante asiático.
En una publicación de blog escrita con su asistente, Eugenio Cerutti, y el economista Adil Mohommad, Gopinath alertó que el daño económico sería aún peor si Trump cumple con su amenaza de imponer aranceles elevados a todos los bienes importados de China, ya que eso «restará aproximadamente un tercio de un punto porcentual del PIB global en el corto plazo».
A principios de abril, el FMI redujo su pronóstico de crecimiento global para 2019 a 3,3%, observando una desaceleración que afecta al 70% de la economía mundial. Sin embargo, optimista de que las principales potencias económicas mundiales alcanzaran un acuerdo, el Fondo esperaba un repunte en la segunda mitad de este año.
Pero las fricciones regresaron cuando el presidente Donald Trump acusó a Pekín de dar marcha atrás en los compromisos contraídos durante el año de negociaciones y, en represalia, más que duplicó los aranceles a importaciones chinas por 200.000 millones de dólares, elevándolos al 25%.
Pekín no quedó atrás, y a partir del 1 de junio prevé aumentar los aranceles a bienes estadounidenses por 60.000 millones de dólares.
Ademas, Trump planea imponer aranceles adicionales sobre unos 300.000 millones de dólares en importaciones del gigante asiático. Si su amenaza se materializara, todas las importaciones de China (más de 539.000 millones de dólares en 2018) se verían afectadas.
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, y otros funcionarios del Fondo han expresado en varias ocasiones su preocupación por la guerra comercial, pero el blog de este jueves presentó el tema con mayor urgencia.
«Si bien el impacto en el crecimiento global es relativamente modesto en este momento, la escalada más reciente podría mermar significativamente la confianza de los negocios y los mercados financieros, interrumpir las cadenas de suministro globales y amenazar la proyectada recuperación del crecimiento mundial en 2019», indicó el texto.
«Este tipo de escenario es una de las razones por las que nos referimos a 2019 como un año delicado para la economía global», añadió.
– Crispación –
Trump argumenta que su agresiva estrategia arancelaria busca reducir el desequilibrio comercial con China, que totalizó 379.000 millones el año pasado.
Pero Gopinath señaló que «los aranceles han reducido el comercio entre Estados Unidos y China, pero el déficit comercial bilateral se mantiene prácticamente incambiado».
Los economistas del Fondo también creen que las tensiones comerciales chino-estadounidenses están comenzando a afectar negativamente a los consumidores, «perjudicando a los hogares de bajos ingresos de manera desproporcionada», así como a muchos productores.
La advertencia del FMI se hace eco de los numerosos pedidos de compañías estadounidenses instando a Trump a encontrar una solución negociada con Pekín.
Los principales fabricantes de calzado y minoristas han dicho que los nuevos aranceles serían «catastróficos».
Y aunque muchos agricultores siguen apoyando al presidente republicano en sus intentos de poner fin a las prácticas comerciales chinas consideradas «desleales», hacen balance del conflicto desencadenado hace más de un año. Un ejemplo: las exportaciones de soja a China pasaron de representar 12.300 millones de dólares en 2017, a 3.100 millones en 2018.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, reconoció el miércoles que algunos bienes de consumo pueden haber subido de precio, pero Trump no parece ser receptivo a los reclamos.
El Banco de la Reserva Federal de Nueva York publicó este jueves una investigación que muestra que el costo total anual de la nueva ronda de aranceles para un hogar típico aumentaría a 831 dólares de 132 en 2018.
«En resumen, de acuerdo con nuestras estimaciones, es probable que estos aranceles más altos creen grandes distorsiones económicas», indicó el estudio.
Tras las conversaciones bilaterales del 9 y 10 de mayo en Washington, las dos partes acordaron continuar el diálogo. Trump incluso anunció una reunión de su homólogo chino Xi Jinping a fines de junio en la cumbre del G20 en Japón.
Pero no se han programado nuevas reuniones, y este jueves China acusó a Estados Unidos de «intimidación» y pidió una demostración de «sinceridad» para poder reanudar las negociaciones. La víspera, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, había dicho que si la política estadounidense es «de máxima presión», China «luchará hasta el final».
