Clairefontaine-en-Yvelines/Francia/AFP
Tan talentoso como inconstante e indisciplinado, Ousmane Dembelé está en el punto de mira de las críticas con el Barcelona y con la selección francesa. Pero el seleccionador galo Didier Deschamps, que sigue confiando en él, cree que «tomará consciencia» de las exigencias del alto nivel.
De vuelta del exitoso Mundial ruso, el campeón del mundo comenzó la temporada con el Barça anotando cinco goles en sus seis primeros partidos. Unos guarismos que relanzaron el entusiasmo en la ciudad condal en torno al veloz extremo por el que el club culé pagó 105 millones de euros al Borussia Dortmund un año antes.
Pero desde entonces, las actuaciones de Dembelé parecen una montaña rusa. El llamado a suceder a Neymar en el Barça alterna prestaciones insípidas con otras fulgurantes. Y sus numerosos problemas de disciplina no contribuyen a mejorar su imagen.
El seleccionador de los ‘Bleus’ Didier Deschamps reconoció este lunes «algunos retrasos» de Dembelé a la hora de llegar a los partidos y a los entrenamientos del Barça, y pidió a su jugador estar «más atento a estas cosas que forman parte del fútbol de alto nivel».
Llegado al Camp Nou con retraso la víspera del ‘Clásico’, a finales de octubre, Dembelé no fue alineado ante el Real Madrid. Tampoco entró en la convocatoria para el partido del domingo ante el Betis. Según la prensa española, Dembelé no se presentó al entrenamiento del jueves, estando mucho tiempo ilocalizable.
Su compañero Gérard Piqué aludió al problema en zona mixta. «Es un chico joven de 19 años (21 años en realidad) que aún tiene cosas que aprender». El fútbol pide dedicación «24 horas de 24», estimó.
– Advertido –
Su parsimonia en el momento de salir del banco para sustituir a Leo Messi contra el Sevilla no gustó a una parte del vestuario, como reflejó Ivan Rakitic.
«En el futuro tendremos que estar preparados para realizar los cambios más rápidamente», indicó el volante croata.
Con Francia, Dembelé ofrece asimismo una cierta apatía, especialmente después del Mundial. Deschamps le dio varias advertencias, aunque el jugador parece no haberse dado por aludido.
«En su defensa dirá ‘yo no soy el único’ en llegar tarde a veces», indicó Deschamps. «Pero en un gran club como el Barcelona y en la selección francesa, debe estar un poco más atento a cosas que forman parte del fútbol de alto nivel».
El seleccionador no pierde la esperanza en que «tome consciencia de esos aspectos».
«Si en un momento dado considero que no responde, se lo haré ver de otra manera diferente», concluyó Deschamps.