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A fin de promover la importancia de la utilización del bambú, search y hacer de este producto un recurso útil para familias rurales, diagnosis actividades artesanales y alimenticia, la Asociación Nacional de Trabajadores Agropecuarios ANTA-Vía Campesina, el Frente Nacional Agrario en coordinación con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), desarrollaron el “Primer Foro Nacional del Bambú y la Dignidad Humana”.
Según el Ministro de Agricultura, Orestes Ortez, el tiempo de hablar del bambú en salones y presentaciones ha terminado, por lo cual es necesario pasar a la práctica, a desarrollar y a estructurar este recurso como parte de la misma estrategia de trabajo de la agricultura familiar.
Asimismo, agregó que el MAG, a través de la Escuela Nacional de Agricultura (ENA) y el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA), está en la total disposición de apoyar a los productores con la asistencia técnica necesaria para la producción del bambú.
Las autoridades del MAG dieron a conocer las bondades y beneficios del bambú, el cultivo del bambú en la estrategia ambiental de adaptación y mitigación al cambio climático, monocultivos y soberanía alimentaria en El Salvador.
Al Foro Nacional del Bambú asistieron un centenar de productores; también participaron el presidente del Frente Nacional Agrario y Miembro de ANTA, Carlos Rodríguez, y el representante de la Fundación Mundubat, Ramón Cucurull.
Presentan Alianza por el Derecho Humano a la Alimentación
El MAG participó en el “Acto de lanzamiento de la Alianza por el Derecho Humano a la Alimentación en El Salvador”, que está integrada por más de 20 organizaciones sociales y que con apoyo de la Unión Europea y el Fondo de las Naciones Unidas para la Democracia (UNDEF), pretende manifestar su compromiso por contribuir al diálogo social y político a favor de la progresiva, eficaz y universal Derecho Humano a la Alimentación.
El titular del MAG expresó que la soberanía alimentaria debe verse en dos dimensiones, primero en el derecho a gozar de una alimentación adecuada en términos de calidad, cantidad y nutrición, ya que es un derecho humano fundamental y el segundo aspecto es el esfuerzo, porque la agricultura tradicional cambie a una agricultura sostenible, que sea capaz de adaptarse a la era del cambio climático. “Quiero reconocer el esfuerzo de las organizaciones de productores, cooperativas, federaciones, grupos asociados y pequeñas empresas en avanzar en los temas relacionados a la agricultura orgánica”, destacó el funcionario.