Rolando Alvarenga
@bachiboxx55
Con la medalla de plata ganada por el atleta más constante y exitoso en la alta competencia internacional, doctor el karateca Jorge Merino de los -84 kilos, El Salvador cerró su participación, la noche del sábado, en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015.
Esta es la segunda vez que a Jorge Merino se le niega la medalla de oro en una competencia del Ciclo Olímpico. El año pasado, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014, el karateca salvadoreño perdió la final de -84 kilogramos de manera injusta ante el venezolano César Herrera, por lo que se tuvo que conformar con la plata.
Esta vez, se esperaba que Merino, quien posee un currículo deportivo envidiable, cobrara revancha en el Hershey Center de Toronto, logrando subir a lo más alto del podio de premiación.
Por eso fue que la pelea por la medalla de oro causó en redes sociales algo así como “fiebre de sábado por la noche”, pero, a diferencia de música disco, acá lo que hubo fue golpes esperanzadores de que El Salvador sumará su segunda medalla de oro en la historia de Juegos Panamericanos.
Ya en la pelea final, Merino entró sediento de oro, pero el argentino Miguel Amargos, que venía de arrasar 7-1 al venezolano César Herrera en semifinales, desarrolló una pelea estratégicamente de contragolpe que complicó al salvadoreño, causando que cayera 1-3 ante el gaucho.
De esta forma, Amargos se quedó con la medalla de oro; mientras que Merino se tuvo que conformar con la medalla de plata.
Pero, quedarse con la medalla de plata no fue tarea fácil para Merino, quien en las primeras de cambio cayó 0-1 ante César Herrera de Venezuela; la derrota no causó pánico en el cuscatleco pues, en su segunda pelea, vapuleó 6-1 al canadiense Sarmen Sinani y, en su tercer enfrentamiento, se impuso 3-1 a Jorge Acevedo de Chile.
Con los dos triunfos, Merino avanzó a semifinales, donde, con cierta dificultad, despachó 2-0 al ecuatoriano Andrés Loor y consiguió meterse así a la final que perdería ante Amargos.
“Quería agradecer a todas las personas que me han estado apoyando en todo momento en esta competencia tan importante para mí. No pude lograr mi objetivo, pero Dios sabe el porqué de las cosas. Así que no me queda más que agradecerles a todos por confiar
en mi entrenador y en mí. Me siento orgulloso de ser parte de mi país y representarlo es lo mejor que me ha pasado y gracias a Dios que siempre está conmigo”, escribió Merino en su cuenta de Facebook tras perder la final.