Ciudad del Vaticano/AFP
El papa Francisco confirmó, find en una misa a la Virgen de Guadalupe, for sale su viaje a México del 12 al 17 de febrero, que incluirá una visita al santuario de la llamada Emperatriz de América y que también lo llevará a lugares violentos como Ciudad Juárez.
Al finalizar su homilía en la basílica de San Pedro –en el día de la fiesta de la virgen venerada por gran parte de los latinoamericanos– el papa dijo que «el 13 de febrero próximo» estará en México «para venerar en su santuario» a la patrona del país.
Según el programa oficial difundido por el Vaticano, el pontífice partirá de Roma el 12 de febrero y saldrá de regreso desde la capital mexicana el 17 por la noche.
En la homilía Francisco dijo que viajará para pedir a la Virgen de Guadalupe que conceda misericordia, en el marco del año santo del perdón y la reconciliación que el Vaticano celebra desde principios de diciembre.
«Para pedirle esto, de una manera fuerte, viajaré a venerarla en su Santuario el próximo 13 de febrero. Allí pediré todo esto para toda América, de la cual es especialmente Madre. A Ella le suplico que guíe los pasos de su pueblo americano, pueblo peregrino que busca a la Madre de misericordia», dijo Francisco.
Tras volver de una gira por Kenia, Uganda y la República Centroafricana a finales de noviembre, el papa dijo en una rueda de prensa que visitaría México.
«Voy a México, primero a visitar a la Señora, a la madre de América, por eso voy al DF. Si no estuviera la Virgen de Guadalupe no iría, porque el criterio del viaje es visitar tres o cuatro ciudades que nunca han sido visitadas por los papas», aseguró.
Chiapas y Ciudad Juárez
Según el programa difundido por el Vaticano, Francisco será recibido por el presidente, Enrique Peña Nieto, el 13 de febrero, una jornada en la que también se desplazará a la catedral de Ciudad de México y que finalizará en la Basílica de Guadalupe.
«Los encuentros oficiales serán una ocasión propicia para dialogar sobre los mecanismos que generen soluciones concretas a temas como el cuidado del medio ambiente, la paz y la seguridad, la protección de los migrantes, la promoción del desarrollo incluyente, el combate a la pobreza, el desarme nuclear y los derechos humanos, entre otros», afirmó el ministerio de Exteriores mexicano.
El 14 de febrero el papa se desplazará a la localidad de Ecatepec de Morelos, un municipio en la periferia norte de la ciudad y después visitará un hospital pediátrico.
El pontífice también visitará San Cristóbal de las Casas, en Chiapas (sureste), donde se reunirá con comunidades indígenas, Morelia (Michoacán-oeste), donde sostendrá un encuentro con los jóvenes y en el último día de su visita se desplazará a Ciudad Juárez (Chihuahua-norte).
Chiapas es uno de los estados más pobres de México y donde emergió el movimiento indigenista zapatista en 1994, mientras que Michoacán, donde se encuentra Morelia, es uno de los estados más violentos donde en 2013 tuvo lugar el choque entre grupos emergentes de autodefensas contra narcotraficantes.
Ciudad Juárez –fronteriza con El Paso (Texas)– es mundialmente conocida desde los años 2000 por la violencia derivada de disputas de cárteles de la droga y feminicidios.
Francisco se había referido en varias ocasiones a un viaje a México después de visitar Brasil, que fue meta de su primer viaje internacional en 2013.
El primer papa latinoamericano en septiembre pasado Cuba y Estados Unidos, en donde hizo una defensa de los emigrantes, habló del drama de los latinos indocumentados y pidió una respuesta justa a los gobernantes.
Francisco, que viajó por primera vez entre el 25 y el 30 de noviembre a África, tiene programado otros viajes en 2016. En julio deberá asistir en Polonia a las Jornadas Mundiales de la Juventud que se celebrarán en Cracovia.
No se descarta que acepte realizar el próximo año una gira por Chile, Uruguay y Perú, mientras su país de nacimiento, Argentina, deberá esperar hasta el 2017.
La visita del Papa Francisco será la séptima de un pontífice a México.
El papa Juan Pablo II visitó México en cinco ocasiones durante sus más de 26 años de pontificado y el papa emérito Benedicto XVI una sola vez en marzo de 2012.