Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
El Foro Nacional de la Salud (FNS) realizó el conversatorio Derechos Sexuales y Reproductivos: asignatura pendiente del Estado en el marco del Día Internacional de la Juventud, como aporte a la construcción de un Estado más inclusivo y garante de los derechos de la población.
El conversatorio contó con representantes del FNS, como Mayra Bolaños, educadora para la Salud y defensora de Derechos Humanos, y el doctor Mario Soriano, coordinador de la Unidad de la Atención de Adolescentes del Ministerio de Salud (MINSAL), quienes destacaron la importancia de los derechos sexuales y reproductivos en el desarrollo sanitario de los grupos poblacionales.
Mayra Bolaños destacó de entrada la importancia de la participación activa ciudadana y comunidades para garantizar los derechos, ejercer una contraloría social y la promoción de los derechos humanos, que incluye los sexuales y reproductivos y en específico de las personas jóvenes.
“A pesar de un marco normativo que avala y que sustenta el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, como la Declaración de Derechos Humanos, la Convención de Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), y en esta última hay tres aspectos indispensables para el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos, que son los derechos civiles y esa condición jurídica y social de ser mujer”, afirmó.
Asimismo, indicó que una parte importante para el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de todos los seres humanos, y en especial las mujeres en todo el transcurso de su vida, son las responsabilidades y participación de los hombres en esta materia.
“Otro instrumento para tomar en cuenta es la Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la mujer (Belém Do Para), que son instrumentos que ayudan aprender porqué es importante en esta sombrilla de derechos humanos tomar acciones prioritarias para las garantías hacia una vida digna en materia de derechos sexuales y reproductivos. Son herramientas y garantías internacionales, que nos permitirán vivir plenamente estas garantías”, acotó.
En cuanto al marco normativo nacional, Bolaños destacó la Constitución de la República que también plantea estos derechos; así como la Ley de Prevención de VIH, la Ley para una Vida Libre de Violencia para las Mujeres, la Ley para Protección para la Niñez y Adolescencia y la Ley de Juventud, que consideró instrumentos legales para abordar estas temáticas y cómo garantizar su cumplimiento e implementación.
Mientras, el doctor Mario Soriano, coordinador de la Unidad de la Atención de Adolescentes del Ministerio de Salud (MINSAL), señaló que estas fechas conmemorativas, como el Día Internacional de la Juventud, contribuyen a construir procesos de cambios y enfrentar desafíos sobre esta materia.
“Este día debe servir para dar voz a la juventud, es importante ver a las personas expertas y técnicas en el área de salud hablando sobre los derechos sexuales y reproductivos, pero es mucho más importante dar voz a los comentarios y preguntas que ofrecen chicos y chicas, para fortalecer el compromiso con los jóvenes y para los jóvenes en todos los procesos, no solo científicos, sino también económicos, políticos y sociales”, indicó.
Sobre la COVID-19, señaló que realmente afecta de manera diferente a grupos de mujeres y hombres, exacerbando aún más las desigualdades existentes y golpea a las niñas, adolescentes y las mujeres. Así como, otros grupos vulnerables dentro de la sociedad.
“Las niñas y adolescentes pueden presentar un riesgo más elevado de padecer violencia infligida por la pareja y otras formas de violencia intrafamiliar. Asimismo, la salud y derechos sexuales y reproductivos son un importante problema de salud pública que requiere de atención particular de la pandemia. La provisión de anticonceptivos y otros insumos de salud sexual y reproductiva es necesaria incluirla en apoyo psicosocial especialmente en aquellas niñas, adolescentes y mujeres, que son objeto de violencia o estar en riesgo de enfrentarla durante esta cuarentena”, acotó.
No obstante, consideró que con la interrupción de los servicios regulares en atención en salud en esta materia, ha incidido hasta con los promotores de salud, que han tenido que volcarse de lleno en la atención del coronavirus, así como limitantes como las rutas de derivación y cambios de lugares en los establecimientos disponibles de atención.
“La provisión de apoyo y salud mental es fundamental en la respuesta y la nueva epidemia tiene relación a la salud mental por factores no solo de violencia, vulneración de derechos humanos, de derechos sexuales y reproductivos, sino también por las condiciones en que se han visto. Y es importante aprovechar la capacidad técnica y la experiencia en los ámbitos de la participación comunitaria, que es pieza clave como las organizaciones (oenegés) con redes de apoyo de mujeres, juveniles líderes religiosos, con el fin de sensibilizar, apoyar y proteger a las personas jóvenes, mujeres y familias”, reafirmó.