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Gloria Silvia Orellana
@GloriaCoLatino
Bernardo Belloso, presidente de CRIPDES, manifestó que la poca humedad en la estación lluviosa debido al ingreso del “polvo del Sahara”, afectará los cultivos de granos básicos y la seguridad alimentaria de la población en los próximos meses.
“El Salvador en los últimos diez años, ha sido un país golpeado por los fenómenos que se vienen desarrollando en los océanos Pacífico y Atlántico; y el país se ha convertido en un Estado vulnerable, por las sequías, inundaciones y los sismos que vuelve a la población sumamente vulnerable”, dijo Belloso a Diario Co Latino.
-¿Qué impacto inmediato tiene la sequía en el país?
A principios del año, en marzo -recuerdo- se anunció la posible sequía o estado de canícula (calor fuerte), para un período corto, sin embargo, ha permanecido más allá. Y las productoras y productores de granos básicos en su mayoría que residen en la costa, tuvieron que acatar la disposición del exministro de agricultura y ganadería (MAG), y del MARN, de abstenerse a sembrar en el período que siempre se ha hecho, que es mayo. Claro, el fenómeno no se desarrolló de manera uniforme muchos en la zona Norte han hecho las siembras en el período normal. Pero en zonas como San Miguel, Usulután, San Vicente y La Paz, este período seco se desarrolló y si bien la gente retrasó el período de siembra, esto sin duda alguna va a repercutir a final de año, cuando la cosecha sea recolectada en un período más tardío, lo que puede afectar a las familias de los pequeños productores o productoras, porque muchos gestionan créditos para trabajar la tierra.
-¿Qué afecta más a estos productores?
Que no tenemos un sistema de producción a través del rastrojo, lo más probable es que las personas productoras no puedan hacer doble cosecha. Tradicionalmente para la primera cosecha es entre mayo a agosto o septiembre y posterior, vuelven a sembrar en octubre para tener cosecha postrera que es de menor calidad, a esa cosecha también se le agregan otros elementos que lo pueden finalizar por medio de sistema de riego.
Este es un peligro que tenemos ahora en el período de sequía, que posiblemente sea doble sequía, y podríamos tener un impacto negativo no solo referido al tema de los granos básicos como el arroz, maíz, frijoles o sorgo. Actualmente, con la competitividad del cultivo de la caña de azúcar a nivel costero, los impactos podrían no solo ser naturales, también socio-naturales, porque la mano del hombre está metida dentro de ese conflicto del clima y de los que se puede acontecer en el territorio nacional.
-¿Cómo podría atenderse esta situación climática?
Primero, es necesario que el gobierno, a través de sus ministerios MAG y MARN, entre otras instituciones, vayan enfocando las demandas y necesidades de la población al no poder garantizarse que habrá una buena cosecha este año. Que a través de un plan, apoye con maquinaria e insumos agrícolas a productores y productoras para garantizar una cosecha de maíz y de maicillo a través de humedales.
-¿Cuál es esa técnica agrícola?
Es la mejor alternativa, es apostarle a la producción con este sistema de humedal, pero debe iniciarse ya, antes que culmine la estación lluviosa, es para la postrera, preparando la tierra con dos o tres aradas profundas, para que la humedad por lluvias, no se vaya al fondo, sino que, se mantenga y sin lugar a dudas ayudaría, a que la mata de maíz o frijol, le de la oportunidad de humedad para toda la cosecha.
Es importante la intervención del gobierno, porque sabemos que el pequeño, el micro o mediano productor no pueden hacer este tipo de actividades, porque no tienen las condiciones básicas. Ha hecho préstamos para comprar la semilla, han pagado para limpiar las tierras y lo único que tienen es un estado de endeudamiento con las cooperativas o cajas financieras, que te facilitan dinero para hacer producir la tierra, entonces, es sumamente complicado.
-¿Qué oportunidades se presentan para la población que vive de producir la tierra a pequeña escala?
Con el gobierno anterior se desarrolló la entrega de paquetes agrícolas que se les daba a productores y productoras, ahora prácticamente podemos decir, que eso no volverá a darse, lo que traería más costos a estas personas, porque van a gastar mucho más. Y segundo, tampoco sabemos que planificaciones está haciendo el gobierno en este momento. No hemos oído ninguna mención desde las autoridades correspondientes –te digo, un plan A-, que se realizan en este tipo de emergencias que afectan el clima del país, entonces la ausencia de ese plan, ha llevado a que la gente continúe normal con las siembras, sin saber si serán destruidas por un período de Sequía o lo contrario, lluvias torrenciales que inunden el territorio de siembra. Estamos en el limbo, sin saber qué va a pasar con las dinámicas productivas económicas de país.
