Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
Ex privados de libertad, ex pandilleros y retornados son los sectores priorizados para el proyecto de Jaime Zablah, empresario y fundador de La Factoría Ciudadana, una empresa con responsabilidad social que busca la rehabilitación y reinserción laboral de la población vulnerable a la violencia.
“En el Centro de Reinserción Laboral tenemos ayuda económica, psicológica, que buscan trabajo, y sean ex privados de libertad que no saben cómo hacer un curriculum. En los últimos cinco años, son 777 jóvenes que han estado en violencia, y yo puedo decir dónde están trabajando estas personas”, explicó Zablah, de su experiencia al frente de una entidad que apoya a esta población.
El empresario, que ha sido uno de los impulsores de la necesidad de la prevención en El Salvador, participó en el conversatorio “El papel de la empresa privada en la prevención y reinserción”, evento realizado en el marco de la Semana por la Seguridad y Convivencia Ciudadana.
Y es que Zablah unió su voz a la de otros empresarios, quienes explicaron las diferentes estrategias con las que ayudan con la reinserción laboral a personas que, de una o de otra manera, han estado involucrados en la violencia la cual durante años ha acechado al país. Situación que no ha sido fácil, debido a los estereotipos y complicaciones que tiene la población salvadoreña contra ex pandilleros o ex privados de libertad.
“He tenido mucha gente que me ha venido a decir que estoy loco por lo que estoy haciendo. Pero no le estoy pidiendo a empresarios que me abran un trabajo, o apoyo económicamente, cuando nosotros nos acercamos a los políticos no tienen que aceptar el proyecto, pero sí tienen que ayudarnos, esta responsabilidad no es solo del Gobierno, todos hay que poner de nuestra parte”, recalcó.