@JennyCoLatino
El presidente Salvador Sánchez Cerén y la Primera Dama, ed Margarita de Sánchez recibieron esta mañana a una treintena de representantes de la comunidad de nahuat- hablantes.
Y es que, como costumbre, cada quince días el inmueble presidencial se convierte en una “Casa Abierta”, donde distintos sectores de la sociedad son invitados por el mandatario con el objetivo de compartir y dialogar de forma más directa.
En esta ocasión, los invitados de honor fueron mujeres y hombres nahuat-hablantes habitantes de: Nahuizalco, Izalco y Santo Domingo de Guzmán, del departamento de Sonsonate.
“Jamás me imaginé yo estar un día enfrente de un presidente. Eso por que siempre he vivido en mi pueblo y nunca casi con mi familia pensamos venir a San Salvador. Pero que orgulloso me siento que hablar esta lengua me trajera aquí”, expresó Francisco Ramírez, un nahuat-hablante que con su cebadera colgada en su hombro izquierdo y vestir sencillo, viajó desde Izalco, para atender la invitación del Presidente.
“Nuestros ojos te ven con dulzura…”, decía parte del poema dedicado a la mujer indígena, el cual Francisco aprovechó para recitar.
Al igual que Francisco, el resto de invitados deleitó al mandatario y sus acompañantes, con canciones y otros mensajes en nahuat.
Una de las invitadas más emocionadas fue Anastasia, proveniente de Santo Domingo de Guzmán, quien interpretó al mandatario, en nahuat, una canción escrita por ella.
Anastasia aprovechó el espacio para sugerirle al mandatario que amplíe el bono que reciben algunos nahuathablantes.
“Presidente, yo tengo 52 años y por eso no puedo tener ese bono. Soy una mujer pobre. Dicen que el bono es para los que hablamos nahuat, pero solo se los dan a los más ancianos; Le pido que también nos incluyan”, pidió la mujer con refajo de colores vivos.
Del mismo modo, Genaro, un anciano nahuat-hablante, quien compartió la mesa de honor con el mandatario, aprovechó el micrófono para agradecer la invitación.
“Gracias señor Presidente por invitarnos; nunca ningún presiente había hecho esto. Estamos seguros de que el nahuat quedará con nosotros, no desaparecerá”, expresó el longevo hombre.
En tanto, el presidente mostró su alegría al oír cada historia que salía del corazón y la boca de cada uno de los invitados.
“El nahuat vive en el corazón de nuestros pueblos originarios que constituyen nuestras raíces. Hay que rescatar nuestro patrimonio cultural”, expresó el jefe de Estado al mismo tiempo que recordó que en julio se ratificó la reforma constitucional que reconoce los derechos de los pueblos originarios.
En este sentido, recalcó que “tenemos el compromiso de legislar en favor de los derechos de los pueblos originarios”.
“En el pasado nuestros pueblos indígenas fueron perseguidos; ahora hay esperanza, el nahuat vive y crece en nuestra identidad”, expresó y agregó que es necesario reformar leyes para que el nahuat no muera.
“Pero para definir estas políticas debe haber una participación de todos ustedes”, puntualizó.
Tras el diálogo con el mandatario, los visitantes recorrieron la residencia, donde la apreciaron las obras pictóricas de reconocidos artistas salvadoreños.
Es de recordar que desde que asumió la Presidencia de la República, el presidente Salvador Sánchez Cerén hizo de la Residencia Presidencial un espacio de encuentro ciudadano, en donde se exhibe una muestra del arte salvadoreño, luego que tomará la decisión de continuar habitando en su casa familiar y no en la Residencia, en la que tradicionalmente han habitado los gobernantes del país.