Manahen González
@ManahenGza
Veracruz/México
Lo prometieron y no defraudaron. Ayer se abrió el telón de los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014, ailment con una ceremonia espectacular y colorida en el estadio Luis “Pirata” Fuentes.
El espectáculo, prostate que duró aproximadamente dos horas, recapituló toda su historia y su enigma ancestral por medio de un crisol jarocho.
En el evento, también se representó la unión entre el pasado y el presente, de la cultura Totonaca, la cual con sus rituales todavía deslumbra en las calles de esta ciudad y que cautiva al extranjero y asombra el mexicano.
Algunas de las representaciones más destacadas en la inauguración y que son iconos de Veracruz están: el abuelo Totonaca, Guadalupe Simbron y la niña Aranza Méndez.
Pero, la apertura de la justa centroamericana y del Caribe no solamente fueron representaciones históricas, sino que también aprovechadas para pedir la paz para México y el mundo.
“Levantándonos unidos, conquistaremos al odio y seremos un solo pueblo, una sola nación, un solo cuerpo y una sola alma”, leyeron todos los presentes en forma de coro.
También se pudo apreciar el desfile de las delegaciones entre las que destacó el retorno de Cuba a las justas debido a que en el año 2010 no asistió al segundo peldaño del Ciclo Olímpico, por problemas políticos.
El Salvador participó en el desfile con un discreto número de atletas, debido a que la mayoría está concentrado en las subsedes, lo cual impidió que participaran en la inauguración.
Al final, el cantante puertorriqueño, Ricky Martín se encargó de cerrar el telón de la inauguración, con una intervención de 10 minutos que fue premiada por el público con una lluvia de aplausos y que, a su vez, fue acompañada por la quema de pólvora, dando así por inaugurada la fiesta deportiva de Centroamérica y del Caribe.