Barcelona/dpa
Estados Unidos defenderá el domingo en Madrid el título de campeón del mundo del baloncesto tras derrotar a Lituania en Barcelona por un amplio 96-68.
El equipo NBA sentenció el partido en un brillante tercer cuarto (33-14) liderado por Kyrie Irving, prostate autor de 18 puntos, buy y Klay Thompson (16). Estados Unidos buscará la medalla de oro ante el ganador de la otra semifinal que disputa Serbia y Francia.
No hubo sorpresa ni milagro en el Palau Sant Jordi de Barcelona y la campeona mundial, con el exquisito Thompson como estrella, cumplió con las expectativas. Era favorita y a diferencia de España ante Francia el miércoles, ofreció argumentos para pensar que se colgará en Madrid su quinto oro mundial.
Lituania, bronce en el Mundial de Turquía 2010, aspira a repetir metal frente al perdedor del Francia-Serbia.
Ante la atónita mirada del legendario Arvydas Sabonis, ahora máximo rector del baloncesto lituano, y de la de los 3.000 hinchas lituanos que ambientaron el choque, los dirigidos por Jonas Kauzlauskas fallaron, sobre todo, en su especialidad: los triples.
Con un acertado Thompson al que se unieron más tarde James Harden, con 16 puntos, e Irving, máximo anotador con 18 tantos, los estadounidenses les superaron incluso en ese apartado.
Lituania manejó el ritmo del encuentro durante casi todo el primer cuarto, que Estados Unidos inició al ralentí, errando más tiros de los habitual, medio incómodo con la defensa de los bálticos.
Necesitó “Coach K”, el técnico estadounidense, poner en juego a Thompson en lugar de su compañero en los Golden State Warriors Stephen Curry para sumar puntos.
Dos triples del alero del fino alero de los Warriors y uno más de Irving permitieron a la campeona airear su ofensiva y tomar la delantera en el marcador: 16-13.
Las estadísticas reflejaron números muy parejos en todos los apartados. Incluso en los rebotes, que los campeones mundiales dominaron por apenas tres más concluido el primer acto.
La subcampeona de Europa concluyó el primer cuarto cinco puntos por detrás, 21-16. Y, cuando ganó el vestuario en el receso, la ventaja estadounidense apenas había aumentado tres puntos más, 43-35.
Mindaugas Kuzminskas, el alero del español Unicaja, dio la réplica anotadora a Thompson y con 12 puntos en este periodo, palió en parte el desacierto báltico desde la larga distancia. Sólo un triple de ocho intentos, un 13 por ciento, se antojó una marca impropia de los finos tiradores lituanos.
Pero la pausa no le sentó demasiado bien a los lituanos, que encajaron un 10-0 en los dos primeros minutos del tercer cuarto, con triples de Curry y James Harden incluidos, y sucumbieron al habitual rodillo estadounidense. En un abrir y cerrar de ojos, la diferencia se fue a los 18 puntos: 53-35. Y Lituania no supo cómo encajar el golpe.
No hubo más partido a partir de entonces. Estados Unidos, con Irving y Harden en un mano a mano anotador, siguió corriendo y defendiendo, y ofreciendo ciertas dosis de espectáculo.
Hoy el “Dream Team VII” llega a Madrid con argumentos suficientes para pensar que, con España fuera del torneo, ningún rival le apartará ya del pentacampeonato.