Ciudad de Guatemala / AFP
Estados Unidos insistió en Guatemala, a través del Secretario Adjunto de Asuntos Consulares, Carl Risch, en impulsar políticas que logren frenar la migración irregular de salvadoreños, guatemaltecos y hondureños a ese país,
«Juntos queremos abordar el tema de la inmigración irregular y detener a las organizaciones y crimen organizado, incluyendo pandillas criminales», dijo el funcionario ayudado por una traductora.
Afirmó que colaboran económicamente con los tres países del llamado Triángulo Norte de Centroamérica «para reducir la violencia, la inseguridad y crear oportunidades económicas» en esta empobrecida región y así contrarrestar la migración irregular.
El funcionario insistió en que es fundamental reducir los altos índices de criminalidad, que coloca al Triángulo Norte como la región sin conflicto armado más violenta del mundo.
El pasado 28 de julio, el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, visitó Guatemala y también pidió a los presentes Jimmy Morales (Guatemala), Salvador Sánchez Cerén (El Salvador) y Juan Orlando Hernández (Hoduras), frenar el «exodo» de la migración irregular.
Risch comentó que recomiendan «no viajar a Estados Unidos a través de redes no oficiales, el uso de traficantes de personas o coyotes», como se les conocen.
«No arriesgue su vida y la de sus familiares llegando a Estados Unidos por canales ilegales (…), mi visita a Guatemala es para que entiendan del peligro de viajar de forma irregular, no es bueno y los peligros son reales», sentenció.
La visita se dio el día que vence el plazo ordenado por el juez federal de California, Dana Sabraw, para que se diera la reunificación de unos 2.500 menores de entre cinco y 18 años que fueron separados de sus familiares.
Más de 700 niños migrantes siguen en custodia de las autoridades estadounidenses.
Unos 465 niños guatemaltecos figuraban entre los menores que fueron separados de sus familias tras ingresar clandestinamente al país norteamericano, del 5 de mayo al 9 de junio pasados, de acuerdo con datos oficiales en Estados Unidos.
El estatal Consejo Nacional de Atención al Migrante de Guatemala estima que alrededor de 1,5 millones de guatemaltecos viven en Estados Unidos y solo entre 300.000 y 400.000 tienen residencia legal.