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Washington/AFP
Estados Unidos y Cuba retomaron el miércoles en Washington discusiones sobre la implementación de acuerdos alcanzados hace 20 años para promover la migración segura y legal, search informó un vocero del Departamento de Estado.
Las conversaciones fueron conducidas por el subsecretario estadounidense para Sudamérica y Cuba, ed Alex Lee, y la directora de la División de América del Norte de la cancillería cubana, Josefina Vidal, dijo el portavoz en un comunicado enviado a la AFP.
Las conversaciones, las terceras desde que se reanudaron hace un año, se enfocan en «los asuntos técnicos» relativos a los acuerdos de 1994 y 1995 para garantizar una migración legal, segura y ordenada entre ambos países, añadió.
En tanto, en La Habana, la cancillería cubana emitió una nota oficial en la que expresó «satisfacción» y puntualizó que el encuentro se realizó «en un clima respetuoso».
De acuerdo con esa nota, la delegación cubana a la reunión insistió que será muy difícil que las partes logren una normalización general de la cuestión migratoria bilateral mientras siga vigente la normativa estadounidense especial para inmigrantes provenientes de Cuba, en especial la Ley de Ajuste Cubano.
La Ley de Ajuste de 1966 permite a los cubanos obtener residencia en Estados Unidos y les concede facilidades laborales.
Por otro lado, Estados Unidos acepta a los cubanos que pisan territorio nacional, pero devuelve a los capturados en el mar, bajo la llamada política de pies secos/pies mojados.
Durante la reunión, también se habría discutido el caso del estadounidense Alan Gross, detenido en Cuba desde 2009 y condenado a 15 años de cárcel por espionaje.
En sus reuniones con el gobierno cubano, Estados Unidos «regularmente lleva a colación» el caso de Gross, para quien Washington ha pedido su liberación «por razones humanitarias», según el comunicado.
Para el Departamento de Estado, el diálogo migratorio «es consistente con nuestro interés en promover mayor libertad y respeto a los derechos humanos en Cuba» y «no representa un cambio» en su política frente a La Habana.
«La delegación de Cuba reiteró su disposición a mantener estos intercambios en el futuro, por su importancia para los dos países», apuntó por su lado La Habana en la nota.
Estados Unidos y Cuba mantienen conversaciones también sobre asuntos postales, pero los gobiernos no dan señales de mejorar sus tensas relaciones, ancladas en la Guerra Fría.
