Ramala/AFP
El presidente palestino Mahmud Abas declaró que habría que estar «loco» para dejar a Estados Unidos desempeñar de nuevo un papel de mediador de paz, y prometió reanudar el esfuerzo para el reconocimiento total de un Estado palestino por la ONU.
Abas habló en Ramala ante altos responsables palestinos reunidos por primera vez desde el anuncio, el 6 de diciembre por el presidente estadounidense Donald Trump, del reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel.
Abas hizo estas declaraciones antes de que Estados Unidos vetara una resolución del Consejo de seguridad de la ONU condenando el reconocimiento unilateral por parte de Washington de Jerusalén como capital israelí.
«Cualquiera que posibilite a Estados Unidos retornar al papel de participante o mediador del proceso de paz es un loco», dijo Abas.
Desde el 6 de diciembre, Abas rechaza cualquier contacto con la administración Trump.
El vicepresidente estadounidense Mike Pence es esperado el miércoles en Jerusalén, pero no debería reunirse con ningún responsable palestino durante su visita.
«Estamos dispuestos a regresar y regresar varias veces ante las Naciones Unidas para convertirnos en miembros completos de las Naciones Unidas», dijo Abas.
El 29 de noviembre de 2012, Palestina se convirtió en «Estado observador, no miembro» de la ONU, durante una votación histórica en la Asamblea general.
Gracias a este nuevo estatuto, el Estado palestino se incorporó a las agencias de la ONU y adhirió a la Corte Penal Internacional (CPI).
Pero Palestina no se ha convertido aún en miembro con todos los derechos de la ONU, aunque es reconocida por más de 130 países.