Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
Al ritmo de la Yo Cambio Band, símbolo del modelo penitenciario, el segundo Centro de Detención Menor fue inaugurado, lo que contribuye a la reducción del hacinamiento carcelario. “Este es un paso importante en la seguridad, es producto de una reforma y de la aplicación de las Medidas Extraordinarias, ejecutadas desde abril de 2015”, dijo el ministro de Justicia y Seguridad Pública Mauricio Ramírez Landaverde, ante el vicepresidente Oscar Ortiz, quien el lunes presidió el evento. La segunda sede del Centro de Detención Menor (CDM) albergará a 3 mil privados de libertad, considerados de menor peligrosidad. Esto se une al proyecto inaugurado el año pasado en el centro penal La Esperanza.
El CDM se construyó con una inversión de $3,746,687, fondos provenientes de la Contribución Especial para la Seguridad Ciudadana y Convivencia.
El CDM cuenta con áreas administrativas, clínica, áreas de aseo personal y las celdas para los reos de menor peligrosidad.
Los privados de libertad que serán ubicados en este CDM no representan un mayor peligro a la sociedad, además, estos tienen un pie fuera del sistema penitenciario, ya que con el trabajo que realizan se les reducen dos días de pena por uno trabajado.
El vicepresidente Ortiz enfatizó que el sistema penitenciario tiene avances que ya no pueden revertirse y que lograrán poner al país como un ejemplo de reinserción y rehabilitación de privados de libertad.
“Esta es una infraestructura modelo para todo el sistema. Este quinquenio pasará a la historia y será recordado por la mayor reingeniería del sistema penitenciario, con una visión a futuro de cómo abordar este problema”, comentó.
Además, aseguró que el gobierno de Salvador Sánchez Cerén ha creado 20 mil espacios en penales, ya que en el 2014 se recibió con 9 mil espacios, y a la fecha ya suma 29,500 espacios.
Ortiz recorrió el CDM, instalaciones que reguardarán a privados de libertad que ejecutarán trabajo penitenciario para Santa Ana, en coordinación con municipalidades e instituciones de Gobierno.
“El CDM ha sido una realidad por el apoyo del Gobierno Central, Asamblea Legislativa y la alianza de instituciones de Gobierno que han permitido unir esfuerzos, como el MOP, ANDA y FAES. Tras 20 años de políticas que no dieron resultados, represivas, donde el control lo tenían los privados de libertad, ahora tenemos un sistema más seguro y controlado”, comentó Ramírez Landaverde.
De igual manera, el titular de Seguridad explicó que también se cuenta con un sistema penitenciario más humano, sin prejuicios ni discriminación.
Con estas instalaciones se incrementará el trabajo penitenciario en alcaldías y escuelas, entre otras. Actualmente, solo con el centro de detención menor en La Esperanza se trabajan 65 proyectos, mismos que podrán ser multiplicados con este nuevo espacio.
El director general de Centros Penales, Marco Tulio Lima afirmó que con esta inauguración se está avanzando en la reforma penitenciaria. “Hoy en día se tiene un sistema penitenciario más humano, productivo, moderno y de segundas oportunidades”, dijo. Además, aseguró que el Gobierno está cumpliendo con la resolución de la Sala de lo Constitucional, que condenó al Estado por contar con un sistema penitenciario inhumano y que sobrepasaba excesivamente su capacidad.
El Salvador llega con esta obra al promedio en América Latina con un 150% de hacinamiento carcelario, mientras que, cuando se inaugure el tercer centro de detención menor en Izalco, llegará a un 130%, convirtiéndose en el hacinamiento más bajo en Latinoamérica.
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