Por María Elena Bucheli
París/AFP
Dirigentes europeos propusieron este lunes «identificar» en territorio africano a las personas con derecho a asilo entre los migrantes que tratan de llegar al continente, para «ponerlas en seguridad lo más rápido posible».
La evaluación de las solicitudes se llevará a cabo «en zonas seguras en Níger y Chad, bajo supervisión de ACNUR» (Agencia de la ONU para los Refugiados), detalló el presidente francés Emmanuel Macron en una conferencia de prensa en París al cierre de una cumbre sobre inmigración en la que participaron líderes europeos y africanos.
La identificación de esas personas se realizará «basándose en listas cerradas de ACNUR», y se aplicará entre «migrantes que ya han sido identificados por ACNUR y que residen en estos países de tránsito» en la ruta migratoria hacia Europa, añadió.
Para el presidente de Francia, esta iniciativa permitirá evitar que «mujeres y hombres tomen riesgos enormes en una zona extremadamente peligrosa y luego en el (mar) Mediterráneo».
En julio, Macron ya había propuesto la creación de centros de registro de migrantes en Libia, donde los solicitantes de asilo que huyen de la guerra podrían presentar una petición para viajar a la UE, pero sin haber consultado a sus aliados europeos.
En lo que va de 2017, unos 125.000 migrantes han emprendido la peligrosa travesía por el Mediterráneo desde las costas de Libia para llegar a Europa, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Más de 2.000 han muerto durante el periplo, según el mismo organismo. En la reunión en París, organizada por el presidente francés, participaron sus homólogos de Chad y Níger, Idriss Deby Itno y Mahamadu Issufú, así como el jefe del gobierno de unidad de Libia, Fayez al Sarraj.
Estos países se encuentran en la principal ruta de tránsito de los migrantes hacia Europa.
Del lado europeo, se unieron en las conversaciones la canciller alemana Angela Merkel, los jefes de los gobiernos de España e Italia, Mariano Rajoy y Paolo Gentiloni, respectivamente, y la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
Ayuda para el desarrollo
Frente a los objetivos presentados por los europeos, los líderes africanos señalaron que para resolver la crisis migratoria es imperativo implementar en paralelo planes de ayuda al desarrollo.
«El problema fundamental es el desarrollo (…), necesitamos recursos», declaró el presidente chadiano, Idriss Deby. «Estamos acostumbrados a los anuncios de nuestros socios desde hace años. Queremos propuestas concretas», agregó, subrayando la necesidad de adoptar soluciones a largo plazo.
«No sólo hay que reprimir, es necesaria una dimensión de desarrollo», abundó el presidente de Níger, cuyo país puso en marcha en 2015 un plan para reducir el flujo de migrantes mediante una lucha feroz contra los traficantes de personas. «Es insoportable que miles de africanos mueran en el desierto o en el Mediterráneo», señaló.
La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, admitió que el «problema» de base es «la pobreza». Pero, «no es necesario inventar un nuevo plan Marshall», dijo, recordando que la UE invierte anualmente 20.000 millones de euros en el continente africano.
Cumbre en Madrid
El jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, estimó por su parte que «es muy difícil y lleva mucho tiempo» dar una solución definitiva a este problema, pero aseguró que Europa «ha empezado a dar pasos en la buena dirección».
Rajoy anunció que dentro de dos meses se celebrará una cumbre extraordinaria en Madrid para dar seguimiento a las medidas adoptadas en París en la materia.
España ha experimentado desde hace varias semanas un creciente flujo de inmigrantes y podría erigirse en 2017 como el segundo país europeo en número de llegadas, por detrás de Italia pero desbancando a Grecia.
Según Frontex, la agencia europea de fronteras, más de 2.300 personas tomaron ilegalmente la llamada ruta del «Mediterráneo Occidental» hacia España solo en el mes de julio, cuadruplicando la cifra del mismo mes de 2016.