Naciones Unidas / AFP
Los miembros europeos del Consejo de Seguridad de la ONU abogaron el martes por una continuación estricta de las sanciones internacionales impuestas a Corea del Norte, luego de una reunión cerrada denunciada por Pyongyang.
«Las sanciones internacionales deben permanecer vigentes y aplicarse de manera plena y estricta», dijeron en un comunicado leído por el embajador francés Nicolas Riviere. Se unieron a Francia en la declaración Bélgica, Alemania, Polonia y Gran Bretaña, así como Estonia, que se convirtió en miembro del Consejo en enero.
El lunes, durante una rara reunión con algunos periodistas, el embajador de Corea del Norte en la ONU, Kim Song, criticó fuertemente a París, Berlín y Londres protestando contra la celebración de una sesión del Consejo de Seguridad sobre las pruebas de misiles de Pyongyang.
Kim Song había dicho que elevar ese asunto en el Consejo impulsará aún más en su país el «deseo de defender» su «soberanía» y subrayó que Corea del Norte «nunca puede sentarse de brazos cruzados» en el intento de abordar el tema de lo que denominan «medidas de autodefensa».
Esto se registra tras el fracaso de las negociaciones con Estados Unidos sobre el programa nuclear de Pyongyang el pasado fin de semana en Suecia, primer encuentro luego de meses de estancamiento tras el fiasco de la anterior reunión entre el líder norcoreano Kim Jong Un y el presidente Donald Trump en Hanói, Vietnam, en febrero pasado.
En su declaración, los europeos dijeron que Francia, Alemania y Gran Bretaña habían solicitado la reunión del Consejo de Seguridad debido a su «profunda preocupación colectiva» por el lanzamiento de misiles la semana pasada, al cual calificaron de «acciones provocativas» que «socavan la seguridad y estabilidad regionales».
«Instamos a la RPDC (siglas oficiales, República Popular Democrática de Corea) a participar de buena fe en negociaciones significativas con Estados Unidos», agregó.