Telesur
El atentado sufrido esta madrugada por el presidente electo de Bolivia, Luis Arce Catacora, fue condenado de inmediato por su antecesor constitucional, el derrocado Evo Morales, quien se encuentra todavía exiliado en Argentina a la espera de la toma de posesión de Arce.
Morales denunció en una publicación en Twitter que «pequeños grupos intentan generar un clima de confusión y violencia», en referencia a quienes en las últimas horas han promovido manifestaciones violentas en varias ciudades del país. La reacción de estos grupos se dio luego que el Tribunal Electoral rechazara una auditoría a los resultados electorales del pasado 18 de octubre.
Evo Morales también dijo que esos grupos «no lograrán imponer» ese clima de violencia, el cual ya se manifestó esta madrugada con el atentado con dinamita en La Paz. El mismo fue perpetrado por un grupo de personas que detonó un artefacto frente a la casa de campaña del Movimiento al Socialismo (MAS), donde Arce estaba reunido.
La respuesta de Morales ha sido: «Nosotros no caeremos en ninguna provocación». Asimismo, reiteró la línea de su movimiento: «Nuestra revolución es pacífica y democrática», en contraste con los hechos de violencia armada promovidos por la derecha opositora que lo sacó del Palacio de Quemado en noviembre de 2019.
El fallido ataque contra Arce, quien toma posesión en 48 horas en la Asamblea Legislativa, se produjo tras la primera jornada de bloqueos de carreteras y un paro convocado por organizaciones ultraderechistas.
La acción fue denunciada por el vocero del MAS, Sebastián Michel, en estos términos: «Hemos sido víctimas de un atentado de un grupo que ha dejado un cartucho de dinamita en la casa de campaña donde estaba reunido nuestro presidente electo Luis Arce. Estamos con mucha preocupación de lo que está pasando».