SANTIAGO/Xinhua
Ex presidentes de América Latina y del Gobierno español temen que la “imposición” de un ciudadano estadounidense para tomar las riendas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) provoque la ruptura de la “histórica convivencia” con la que nació el ente, por lo que piden posponer la elección del próximo presidente del organismo.
“Tal como se ha procedido con la candidatura de un ciudadano estadounidense, estamos no sólo frente a la ruptura de una práctica que ha acompañado la historia de la institución, sino ante una gravísima violación del acuerdo político fundamental con el cual nació”, señalan. Los ex presidentes afirman, en un comunicado difundido el miércoles, que “la elección convocada para el 12 y 13 de septiembre, de ocurrir, carecería de legitimidad y más pronto que tarde debiera considerarse nula”.
En la misiva, firmada por los ex presidentes de Chile, Ricardo Lagos; de Brasil, Fernando Henrique Cardoso; de Uruguay, Julio María Sanguinetti; de Colombia, Juan Manuel Santos, y de México, Ernesto Zedillo, además del ex jefe del Gobierno español, Felipe González, se señala que por 60 años el “BID ha funcionado bajo las normas establecidas en los debates de 1959”.
“Las partes, constituidas en una Comisión especial, determinaron los mecanismos de adhesión, los sistemas financieros de los aportes y la organización misma de la entidad. Fue en ese marco, tras un intenso debate entre, donde se resolvió establecer la sede del banco en Washington”, agrega.
“Y en la primera sesión de los gobernadores, realizada entre el 3 y 16 de febrero de 1960 en El Salvador, quedó afincado el principio de reservar la presidencia del BID para un latinoamericano y la vicepresidencia para un ciudadano estadounidense”, se explica en la carta.
Sin embargo, manifiestan que cuando a mediados de junio de este año el Gobierno de Estados Unidos anunció la postulación de un estadounidense a la presidencia del BID, “rompe la lógica y la sabiduría de aquel acuerdo político fundacional”.
“Desde el Gobierno de (Dwight) Eisenhower hasta marzo 2020 rigió una lógica institucional. Ahora el presidente norteamericano (Donald Trump) quiebra esa convivencia y busca imponer a su candidato por encima del consenso histórico”, reiteran los ex líderes de Iberoamérica.
Agregan que, por eso, “esta convocatoria carece de validez. Los Gobiernos de todos los países miembros del BID debieran darse cuenta que la institución no puede tener un presidente surgido de un acto carente de legitimidad histórica y política”.
El 10 de marzo, un comunicado del BID señaló que “la Asamblea Anual 2020 del Grupo BID ha sido aplazada y tendrá lugar en Barranquilla, Colombia, en la primera mitad de septiembre del 2020. Dicha reunión también será la ocasión de la elección del próximo presidente del BID”.
El 27 de julio se anunció la nueva postergación de la Asamblea de Gobernadores para marzo de 2021, pero se mantuvo la fecha de la elección del presidente del BID.
Washington tiene la intención de nominar a Mauricio J. Claver-Carone, un alto funcionario de la Casa Blanca, para presidir el BID, con lo que busca demostrar, según palabras del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, “el fuerte compromiso del presidente Trump con el liderazgo de Estados Unidos en importantes instituciones regionales y con el avance de la prosperidad y la seguridad en el hemisferio occidental”.
En la misiva, los ex presidentes afirman que “aquella convocatoria nació bajo serios cuestionamientos porque ya estaba en marcha esa candidatura surgida solo gracias a la ruptura de los procedimientos institucionales históricos”.
Por lo que, “lo políticamente sensato es postergar ambas acciones”, puesto que Estados Unidos, sin consulta ni debate en los organismos pertinentes del BID, lanzó su candidatura pasando por encima de acuerdos y normas bajo las cuales todas las partes del BID entendieron su creación y funcionamiento a través de los años.