Redacción YSUCA
La Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas” (UCA) fue sede del primer Tribunal Simbólico de Justicia, Verdad y Reparación. Laura Morán, coordinadora del Eje Libre de Violencia, de la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local, explicó que estos tribunales buscan ofrecer el acceso a la justicia que ha sido negada a muchas mujeres y personas de género y sexualidades disidentes.
Morán señaló que el sistema de justicia en el país carece de un enfoque de derechos humanos y justicia social. Esto ha llevado a que muchas mujeres que enfrentan emergencias obstétricas sean criminalizadas, como los casos de Beatriz y Lilian. Además, mencionó que la falta de una ley de identidad para la comunidad LGTBIQ+ contribuye a la negación de su existencia y, por lo tanto, a su criminalización.
David Morales, exprocurador para la Defensa de los Derechos Humanos, destacó que estos tribunales simbólicos son cruciales en un contexto donde el Estado sigue vulnerando derechos humanos. “Estos eventos funcionan como un termómetro que evidencia la ausencia de justicia y el mal funcionamiento de las instituciones en favor de la población”, afirmó Morales.
Los Tribunales Simbólicos exponen la violencia de Estado contra poblaciones vulneradas, como mujeres y personas LGTBIQ+. En muchos casos, se asume una presunción de culpabilidad que viola el principio de inocencia.
Asimismo, Morales señaló que se imponen penas de hasta 30 años sin pruebas concretas, irrespetando los principios constitucionales, basándose en ideas preconcebidas sobre las mujeres y la comunidad LGTBIQ+. Para el exprocurador, el sistema penal en el país opera de forma perversa, criminalizando a mujeres que han sufrido emergencias obstétricas.