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El museo Tin Marín enfrenta un proceso civil y mercantil por el uso de terrenos pertenecientes a la familia Hernández Gutiérrez y asociados, que adquirieron el terreno en 1946.
Joaquín Salazar
@JoakinSalazar
Eleonora de Salazar mantiene un proceso civil en contra del museo Tin Marín en el Juzgado Quinto de lo Civil y Mercantil de San Salvador, por la supuesta utilización sin permiso de 1,335 metros de terreno, que fueron utilizados por el museo de los niños desde la administración de Armando Calderón Sol.
“He puesto una demanda ante el Juzgado, porque exijo que me paguen todo lo que han ocupado desde 1998, lo cual incluye el alquiler del terreno, los costas procesales y todo lo que han hecho uso de mi terreno, exijo que me devuelvan el espacio y que si quisieran quedarse o comprarlo tendríamos que negociar”, explicó Eleonora Salazar.
El proceso civil se inició dos años atrás, luego de no llegar a un acuerdo con la Junta Directiva del Museo, con quienes desde hace 15 años trató de hablar.
Según la demandante, el museo utiliza un área de 1,335 metros cuadrados de su propiedad, tomados con su consentimiento en el gobierno de Calderón sol, ya que la esposa del mandatario, Elizabeth de Calderón, entregó ese terreno a Tin Marín.
“Desde hace más de 15 años estoy tratando de comunicarme con ellos, para que resolvamos esta situación y ellos no han querido dar la cara hasta ahora”, explicó la demandante. El terreno se encuentra a nombre de Hernández Gutiérrez y Asociados, empresa familiar que representa Eleonora de Salazar.
“Mi padre adquirió ese terreno en el año 1942 a 1946 y desde entonces nos ha pertenecido”, recalcó.
