Ciudad de México/dpa/AFP
El grupo de expertos enviado a México por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para investigar la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa (sur) fue blanco de espionaje a través de un sistema adquirido por el gobierno mexicano, reveló este lunes un estudio independiente.
El grupo de expertos que investigó la desaparición de 43 estudiantes en México fue blanco de un software vendido al Gobierno para vigilar a criminales y que supuestamente se usó para espiar a periodistas, activistas y políticos de oposición, reveló hoy la Universidad de Toronto.
Según nuevo reporte del laboratorio Citizen Lab de esa universidad, que analiza tecnologías de la comunicación y la información, uno de los miembros del equipo sufrió dos intentos de infectar su celular con el programa espía en marzo de 2016, poco después de que este grupo «criticara al gobierno mexicano por interferir en su investigación, y mientras preparaba su reporte final».
Los mensajes recibidos contenían los enlaces maliciosos que convierten los celulares en vehículos de espionaje mediante el uso del programa «Pegasus», creado por la israelí NSO Group para venderlo sólo a Gobiernos con el fin de combatir la delincuencia y el terrorismo.
El programa convierte a los teléfonos en vehículo de espionaje cuando el afectado da click a un enlace engañoso enviado en un mensaje, lo que posibilita que el monitoreo de los correos electrónicos, mensajes, la cámara, el micrófono y el sistema de GPS.
Citizen Lab hizo público en a mediados de junio que más de una decena de periodistas y defensores de derechos humanos mexicanos sufrieron 76 intentos de infección con el software «Pegasus» entre 2015 y 2016.
Una semana después difundió otro informe que señalaba que tres miembros del opositor Partido Acción Nacional, entre ellos su líder, Ricardo Anaya, también sufrieron intentos de infección con el malware en junio de 2016.
En el caso del grupo de expertos, comandado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el informe detalla que los ataques con «Pegasus» se dieron justo después de que los investigadores criticaron públicamente al Gobierno mexicano por obstaculizar su trabajo.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) estaba conformado por cinco expertos y fue creado por acuerdo del Gobierno mexicano y la CIDH para que investiguen de forma imparcial la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, ocurrida en septiembre de 2014 en el estado sureño de Guerrero.
Durante su mandato de un año, el GIEI sostuvo varias reuniones en México con los padres de las víctimas y con funcionarios. Además, puso en evidencia los fallos del Gobierno en las investigaciones sobre el caso y sus relaciones se tensaron hacia el final de su misión.
Para usar el software en los miembros del GIEI se había necesitado el aval de un juez federal, pues contaban con inmunidad diplomática.
El presidente Enrique Peña Nieto ha negado que su gestión esté involucrada en el presunto espionaje, que provocó un escándalo en el país. Su administración ha iniciado una investigación al respecto.
México firmó al menos tres contratos con NSO Group por 15 millones de dólares antes de 2013, según publicó «The New York Times». Según «Milenio», el programa fue adquirido por la Fiscalía general en 2014 y fue terminado de instalar en marzo de 2015.
El análisis de la universidad canadiense confirmó además que «al menos 19 personas fueron blanco del programa NSO en México, incluyendo abogados, políticos, periodistas, activistas que combaten la corrupción, científicos, defensores de la salud pública, agentes gubernamentales y sus familiares».
El escándalo sobre el presunto espionaje estalló el 19 de junio a raíz de un reportaje publicado por el diario estadounidense The New York Times, que reveló los hallazgos de la Universidad de Toronto y llevó a un grupo de activistas y periodistas a denunciar legalmente al gobierno de México por intervenir sus teléfonos móviles.
La presidencia de México negó estar detrás de estos espionajes y la fiscalía general anunció una investigación sobre este caso.