Yanuario Gómez
@DiarioCoLatino
Con la finalidad de conocer distintos puntos de vista sobre el estado actual de los derechos humanos en la región, la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) desarrolló el conversatorio “Protección de los Derechos Humanos hoy”, en el cual participaron miembros de organismos internacionales especializados en el tema.
Para los participantes en el intercambio de ideas, uno de los principales problemas de la región es que los Estados ratifican tratados y leyes sin profundizar en la complejidad que supone el cumplimiento de los mismos tanto desde el punto de vista operativo
como presupuestario.
Víctor Rodríguez miembro del Instituto Interamericano de Responsabilidad Social y Derechos Humanos (IIRESODH) sostiene que al encontrarse con estas condicionantes, los estados tienden a solicitar a los organismos especializados flexibilizar la interpretación de los tratados y al tener respuesta negativa los atacan.
“Lo que más me preocupa es que hoy los ataques al sistema de Naciones Unidas y al sistema interamericano en particular vienen de gobiernos democráticos, ni siquiera en las peores dictaduras se vieron tan atacados por gobiernos como ahora”, dijo Rodríguez.
Para el integrante de IIRESODH por lo anterior más importante que tener tratados excepcionales es tener órganos excelentes de interpretación de los mismos, capaces de construir una cultura de derechos humanos a través de la potenciación de la dignidad de las personas con claridad.
Los integrantes del conversatorio externaron que en Latinoamérica se tiende a copiar todo lo establecido por Europa en materia de legislación sobre derechos humanos, pero que en la actualidad el mejor sistema de protección es el interamericano porque en sintonía con el mismo se crearon instituciones importantes.
Al respecto, Patricio Freire, representante de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) afirmó, que la promoción de una cultura de derechos humanos es importante para que la sociedad use los organismos especializados en el tema como instrumentos contra la violación masiva de los derechos. “En ese marco es que nosotros estamos comprometidos no solo en dictar sentencias, sino también en provocar reflexión no solo jurídica sino mucho más integral porque la defensa de los derechos humanos no es atributo de abogados, sino el conjunto de la sociedad asumiendo y apropiándose de una agenda de derechos”, indicó Freire.
Freire consideró que cuando la sociedad se apropia de una cultura civilizatoria de derechos humanos, puede revertir la correlación de fuerzas permitirá que las sentencias y logros conseguidos permanezcan en el tiempo.
Los profesionales del derecho consideraron que debe existir un proceso de apropiación de la cultura del respeto a los derechos humanos transformadora, emancipadora que haga del uso de los organismos especialistas en el tema un contrapeso al autoritarismo y debilitamiento de la democracia.