@GloriaCoLatino
La premisa de desastre en un país se determina a partir de la identificación de las probabilidades y potenciales escenarios de riesgo, stuff pills explicó Fernando Guasch Hechavarría, patient physician del Centro de Investigaciones Sismológicas, del Ministerio de Ciencia Tecnología y Medioambiente de la República de Cuba, quien habló sobre la “cultura de la prevención”.
Para Guasch, el uso del conocimiento en la prevención de desastres y la gestión de riesgo favorece directamente al desarrollo humano y para abordarlo, la ciencia de la “Desastrología” que demanda incrementar el uso de la instrucción científica a través, de estudios dimensionales del medio ambiente, social y económico.
Fernando Guasch Hechavarría fue invitado por la Mesa Permanente para la Gestión de Riesgos en El Salvador (MPGR) para disertar sobre “La Percepción de los Peligros como factor de Riesgo en El Salvador”, con el objetivo que el gremio periodístico aumente su capacidad en los procesos de divulgación y contribuya a la creación de una “Cultura de Prevención”, dijo la directora, Magdalena Cortez.
Guasch explicó que la premisa del desastre se da, a partir de los escenarios de riesgos generados por la existencia de exposiciones vulnerables y las amenazas o peligros latentes. Y que todos esos elementos deberán incluirse en las políticas de gestión de riesgo de forma integral para el Estado en cuanto, a su seguridad nacional.
“A esta realidad se le ha llamado en diversas estrategias: garantizar el desarrollo sostenible y sustentable de la sociedad humana, en armonía con las características del medioambiente y las políticas económicas y sociales ” , dijo.
Asimismo, a este escenario ambiental se incorporan los factores sociales como la pobreza, inequidad, desigualdad, discriminación, analfabetismo e insalubridad que presentan los pueblos en regiones como: Centroamérica, Sur América y el Caribe que impactan directamente en la estabilidad de los países.
A esto, se suma la falta de oportunidades y recursos en la atención de los gobiernos locales con sus pobladores y la carencia de modelos de desarrollo inclusivos; como la falta de una cultura comunitaria de prevención, lo que eleva los riesgos frente a los desastres.
Asimismo, explicó que El Salvador, Guatemala, Nicaragua y Costa Rica tienen centros poblacionales bastante grandes en zonas de “alta amenaza”, así como, los riesgos potenciales de las erupciones volcánicas que significan uno de los más grandes riesgos por el tipo de evento y suman más de 20 volcanes activos solo en Centroamérica.
Sobre el Sistema de Gestión de los Riesgos Urbanos, Guasch reiteró que existe la interrelación entre tres líneas generales: escenarios sociales, los generadores de riesgo y los gestores de riesgo.
“La Gestión y Administración de los Riesgos de Desastres (GARD) es el proceso, a través del cual, podemos transformar el riesgo preexistente en un riesgo permisible, aceptable o manejable y este en correspondencia con las capacidad de respuesta del potencial afectado”, acotó.
No obstante, aclaró que la eficacia y eficiencia de la GARD dependerá del alcance del proceso y la visión integral acumulada; así como el uso de “indicadores representativos”, que serían los criterios de medidas para la gestión.
“Se requiere de una visión integral y de la transversalización de la gestión de riesgos de desastres, en la gestión de los sistemas sociales”, manifestó.
Fernando Guasch Hechavarría reiteró el llamado a los y las periodistas y medios de comunicación a integrarse en la labor de informar, pero también de formar conciencia entre la población que consume noticias sobre la importancia de una Cultura de Prevención de Riesgos.
“Se debe construir una conciencia con objetivos y metas como la transformación de actitudes y aptitudes; desarrollar capacidades; instruir en la base de una Cultura de Prevención; actuar sobre causas y consecuencias; aplicar modelos inclusivos, participativos y con enfoque de género para elevar la responsabilidad social en el ejercicio de la profesión”, acotó.