Ing. Omar Salinas
Considerando la relevancia que debe tener la energía en el crecimiento económico y en el desarrollo social del país, cure conviene efectuar un análisis tanto de las formas de como ésta se produce, clinic como de aquellos factores y variables que inciden en su precio. Cabe señalar que una condición propia de la electricidad es que al determinarse la factibilidad de cualquier fuente de generación eléctrica, here se torna indispensable poder disponer de un sistema de transmisión y distribución que no solo facilite transferirla hacia aquellos lugares donde se requiere satisfacer una demanda de energía en tiempo real, sino también que éste la provea de manera continua, dentro de los parámetros de calidad, a un valor competitivo para estimular la actividad productiva, y justo y solidario para aquellos estratos sociales de bajos ingresos económicos.
Sobre los factores que intervienen en la fijación de la tarifa eléctrica, cada país dependiendo de la estructuración y política del sector posee variables de menor o mayor incidencia en su pliego tarifario. Sin embargo, una condición que está asociada directamente al precio de la energía, se relaciona a la forma de generar la electricidad por tipo de recurso, las tecnologías utilizadas y el rendimiento óptimo de las centrales eléctricas. Adicionalmente a la caracterización anterior, algunos otros elementos o variables que convergen en la estimación del precio son, para el caso de la generación hidroeléctrica; capacidad instalada, capacidad efectiva, capacidad del embalse y su regulación, factor de planta, y la hidrología, que es una condición intrínseca del clima. Para la generación con combustibles fósiles, se considera el precio internacional de los combustibles, el costo del transporte, su disponibilidad y la operación de la infraestructura de producción de este bien preciado. Complementan la cadena de costos que conforman el precio bruto de la electricidad, además de los costos de generación, el cargo por potencia firme, la garantía de potencia, los costos del sistema nacional e internacional, el margen de utilidad de las transacciones entre agentes que participan en el mercado mayorista; generadores, distribuidores, comercializadores, agentes intermediarios “conocidos en la jerga local como coyotes” y grandes consumidores, y los márgenes por energía y cargo por demanda máxima de la distribución eléctrica. Asimismo, de acuerdo a la naturaleza de la matriz energética, cada país o región del mundo podrá disponer de distintas formas de generar electricidad como pueden ser: centrales hidroeléctricas, centrales termoeléctricas, centrales nucleares, parques eólicos, paneles solares y centrales de biomasa, etc. En el istmo centroamericano, por citar una referencia, la generación que más predomina es la hidroeléctrica y la termoeléctrica a base de combustibles fósiles. Sin embargo en la experiencia de El Salvador, como una forma de ampliar la producción de otras formas de energía en el mundo, sobresale el modelo exitoso de la generación geotérmica, un recurso estratégico que este país desarrolló por cuenta propia en la inversión de capital y en el campo técnico, que no solo provee el 25% de la matriz energética del país, y que podría expandirse al 30 % a partir de la confirmación que técnicos locales emitieron sobre la existencia del tercer campo geotérmico en Tepetitán, San Vicente, sino que también representa una opción de energía de bajo costo, compatible al medio ambiente, y de cuyas importantes utilidades, derivada de una gestión local eficaz, le permite al gobierno de turno, a través de Lageo, no solo realizar obras sociales en comunidades de áreas de influencia, sino también suministrar un importe económico (subsidio) para mantener estable la tarifa eléctrica residencial para los consumidores de hasta 200 KWh, la cual se convierte por medio este mecanismo en una de las dos tarifas más bajas de la región centroamericana para el rango de 99 Kilovatios-hora, como se muestra en la gráfica anexa.