Gloria Silvia Orellana
@DiarioCoLatino
Carolina Vásquez, directora de la Alianza Nacional por la Dignidad de las Personas con Discapacidad (ANDPD) informó que se desarrolló el “simulacro nacional de riesgos”, el cual tenía como objetivo dar aportes técnicos en cuanto a la “gestión de riesgo inclusivo”.
En el evento realizado en el Mega Albergue de Jiquilisco, Bajo Lempa Usulután, también participaron las autoridades locales, nacionales y diversos actores sociales.
Los participantes recibieron al final del ejercicio algunas sugerencias y observaciones de personas que viven con alguna discapacidad, con el fin de generar un tejido de empatía y conocimiento que permita tratar con dignidad a este grupo poblacional.
La Alianza Nacional por las Personas con Discapacidad tiene como principios de trabajo: la equidad e igualdad de género, la participación activa y democrática, la comunicación e información accesible, la no discriminación por ninguna causa y el trabajo en equipo y articulado.
“Esta acción la estamos haciendo gracias a la formación que hemos recibido por parte de la Cooperación Alemana en gestión de riesgo inclusiva, en la cual se analiza la forma correcta y el abordaje adecuado de las diversas discapacidades de las personas en situaciones de emergencia”, señaló Vásquez.
La Alianza Nacional por las Personas con Discapacidad, pretende crear y articular junto al CONAIPD y Dirección de Protección Civil, capacidades que permitan generar una “guía” de avanzada para tratar a personas con discapacidad desde una visón de dignidad y derechos humanos.
El Sistema de Naciones Unidas (ONU) ha sido enfático en definir que las personas con discapacidad tienen derecho a ser protegidas de todas las formas de discriminación, por lo que han generado normas para su inclusión, protección y atención durante las emergencias.
Las “personas con discapacidad se ven afectadas de manera desproporcionada en situaciones de desastre”, por lo que se deberá tomar en cuenta en las medidas o políticas sus necesidades particulares, y así ser cubiertas de manera proporcional y equitativa.
Para Ingrid Rodríguez, de la Alianza Nacional por la Dignidad de las Personas con Discapacidad, que estuvo a cargo del manejo de las personas durante el simulacro de las personas con discapacidad visual, pudo constatar que en la “orientación del área geográfica”, el lugar en mención no contaba con sanitarios accesibles, se encontraban en terreno árido (dificultad) y cálido.
“He podido evaluar que en el área de recepción, en la toma de registro, prácticamente no cuenta con aire acondicionado ni ventiladores de techo por lo que se percibió una gran ola de calor por el incremento de las personas juntas en un sólo lugar para su ingreso”, acotó Rodríguez.
Igualmente, Daniel Portillo, representante de la Alianza Nacional por la Dignidad de las Personas con Discapacidad, señaló que al evaluar el lugar dispuesto del Mega Albergue, no cumple algunos requisitos como centro de resguardo.
“Necesita un punto de mejora porque el calor es intenso y se siente que no hay ventilación adecuada. En el tema de la disposición de las camas están muy juntas, y no podemos controlar todo tipo de enfermedades respiratorias -que son muchas- y contagio colectivo sería inminente”, sostuvo.
Tampoco hay señales claras, “entramos al lugar y estábamos perdidos, porque no había ni información mínima como acceso a los baños y creemos que se debería mejorar muchas disposiciones porque no hay un orden. No tienen una guía para personas con discapacidad visual o una guía táctil, no hay señalización tecnológica, -en nuestro caso- somos personas sordas, nos guiamos por colores, y así saber hacia dónde debemos dirigirnos. Eso es lo que he observado”, añadió Portillo.
Las observaciones y sugerencias de las personas con discapacidad fueron muy bien recibidas por Abraham Sigüenza, encargado y administrador del Mega Albergue de Jiquilisco, cuyo simulacro buscó medir la capacidad de respuesta de la población en situación más vulnerable y afectados en una emergencia, dentro de un contexto de la erupción del volcán Chaparrastique.
“Ahora, nos han visitado diferentes organizaciones vinculados al simulacro y tenemos el aporte de la Alianza y CORDES, junto a la Cooperación Alemana, y todo esto nos sirve para aprender y nos ayuda para resolver problemas en atención de personas con discapacidad”, señaló.
“Hemos podido mostrar las instalaciones y hemos identificado áreas vulnerables. Otras áreas que demandan atención y mantenimiento para poder tener un espacio acorde de atención para las personas y en especial a las personas con alguna discapacidad”, acotó Sigüenza.
Asimismo, calificó la participación de las personas que integran la Alianza por la Dignidad de las Personas con Discapacidad, como “excelente”, porque en el ejercicio del simulacro se pudo contar por primera vez, con personas realmente con discapacidad que permite de inmediato identificar las debilidades en el manejo operativo y otros obstáculos en el inmueble que no se habían determinado.
A “La Alianza la felicito porque es la única que ha venido a darnos aportes que son importantes para atender a estas personas vulnerables, y felicito a CORDES por hacer esta práctica. Porque nos dan ideas y todo el apoyo que han entregado, algo muy importante de realizar para identificar todas nuestras dificultades para su atención.
“Ahora tenemos claro que el Mega Albergue de Jiquilisco, demanda mayor y más clara señalización y otras elementos para atender a las personas mayormente vulnerables. Y es importante que una gestión de riesgo cuente con el tema psicosocial, acceso y la comunicación”, concluyó Sigüenza.