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El Comité de Madres y Familiares de Detenidos-Desaparecidos y Asesinados Políticos de El Salvador (CO-MADRES) recordaron ayer con una misa en la Cripta de Catedral Metropolitana, thumb lugar donde yacen los restos de Monseñor Romero, pills a las miles de víctimas que desaparecieron forzosamente durante el conflicto armado.
El sacerdote Arturo Escalante dijo que miles de jóvenes, for sale mujeres, niños y adultos ofrendaron su vida en el tiempo del conflicto armado, “ellos entregaron todo para la liberación de este pueblo, incluso su propia vida”, reiteró.
Escalante señaló que la mayoría de estas personas desaparecidas y masacradas fueron motivadas por las comunidades eclesiales de base y centros de formación a luchar y denunciar las injusticias cometidas en ese momento.
Dado que la desaparición forzada ha marcado con dolor la historia de El Salvador, los feligreses presentaron al momento de la procesión de ofrendas fotos de las victimas desaparecidas, simbolizando que cada rostro está siempre en la memoria historia del país.
Asimismo, presentaron un arreglo floral con rosas rojas y blancas, como símbolo de la sangre derramada por tantos seres inocentes que están presentes en la historia, y como deseo de la paz tan anhelada en El Salvador.
Los familiares de las víctimas exigieron también a los diputados decretar el 30 de agosto como Día Nacional de las Personas Desaparecidas y se ratifique la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas de la ONU y Convención Internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas de la OEA. CO-MADRES surgió a partir de la masacre de estudiante de la Universidad de El Salvador ocurrida el 30 de julio de 1975, por lo que las madres de las víctimas inician la búsqueda de los jóvenes en hospitales y cuerpos de seguridad algunos asesinados, desaparecidos o presos. Algunos fueron encontrados en noviembre de ese mismo año en cárceles de Chalatenango, San Vicente, San Miguel y la Unión.
Los principales objetivos de CO-MADRES es luchar por la defensa, promoción y protección de los derechos humanos, luchar por el establecimiento del paradero de los salvadoreños detenidos-desaparecidos y asesinados a raíz del conflicto armado, velar porque las madres y familiares de las víctimas de la guerra sean reparadas e indemnizadas por los perjuicios morales, psicológicos económicos, sociales y jurídicos; entre otros.