Roma/AFP
La organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) anunció este miércoles que prepara una serie de guías para ayudar a identificar a los tiburones de aguas profundas y lograr una pesca más sostenible.
«Aunque no son habitualmente el objetivo de la pesca, los tiburones y ciertos grupos de esponjas y corales de agua fría pueden verse afectados por barcos que realizan pesca de arrastre en aguas profundas, entre 200 y 2.000 metros», advirtió la agencia de Naciones Unidas, cuya sede central se encuentra en Roma.
«La tasa de supervivencia de estas especies de captura accidental en aguas profundas tras ser liberadas de nuevo en el mar, es baja», reconoció en un comunicado.
La agencia internacional sostiene que pocos países proporcionan actualmente información detallada sobre la captura accidental en aguas profundas, por lo que es difícil entender los efectos de la pesca en estos ecosistemas marinos vulnerables.
«Allí abajo existe una gran variedad de especies extrañas y maravillosas, que juegan un papel importante en los ecosistemas de aguas profundas», explicó Johanne Fischer del Programa Fishfinder de la FAO.
«Pero científicos y pescadores -añadió- pueden tener problemas para identificarlas, ya que hay pocas herramientas de identificación disponibles. Por ello tienden a agrupar las especies como ‘tiburones de aguas’ profundas cuando informan de sus capturas».
«En general, la información sobre capturas de peces cartilaginosos -tiburones, rayas, mantas y quimeras, todos ellos con esqueletos hechos de cartílago en vez de hueso- es escasa en comparación con las de peces óseos», precisa la agencia.
«A nivel mundial -e incluyendo todos los tipos de pesca-, sólo el 36 por ciento de las capturas de peces cartilaginosos se identificaron a nivel de especie o género en 2011, en comparación con más del 75 por ciento de los peces óseos», asegura la FAO.
Una guía para salvar un ecosistema precioso
Necesitamos una visión más clara de lo que está pasando, y esto es especialmente cierto para las aguas profundas», sostiene la analista pesquera de la FAO Jessica Sanders.
«Las nuevas guías de aguas profundas de la FAO ayudarán a los pescadores a ofrecer información más detallada, y como resultado los países estarán en mejor posición para implementarlas», estima la experta.
Las aguas profundas son el hábitat más grande del planeta, ya que abarcan el 53 por ciento de la superficie del mar, y los pescadores han explotado cada vez más sus recursos en las últimas décadas, precisa la FAO.
La pesca en aguas profundas en las zonas situadas fuera de la jurisdicción nacional (zonas ABNJ, por sus siglas en inglés) queda fuera del control de cualquier país y se desarrolla con frecuencia en zonas con relieve marino, como los montes submarinos.
«Estos ecosistemas suelen ser sensibles, ya que muchas especies de aguas profundas maduran y se reproducen con lentitud, siendo especialmente vulnerables a la sobrepesca», advierte la entidad internacional que invita a las autoridades y a los pescadores a adoptar estrategias específicas.
La primera guía de la serie de la FAO sobre especies vulnerables de aguas profundas se centra en el Océano Índico, una de las regiones más diversas y menos conocidas en materia de peces cartilaginosos de aguas profundas.
La guía está plastificada para su uso en el mar e incluye ilustraciones en color de los tiburones más difíciles de identificar o capturados con mayor frecuencia, así como información de otras especies que a menudo son mal identificadas.
La guía se acompaña de un catálogo de las especies de mayor profundidad que incluye información científica detallada.
La serie incluirá a la larga esponjas y corales y cubrirá todas las zonas más importantes de pesca de aguas profundas del mundo.
La FAO lleva tiempo trabajando para mejorar la gestión y conservación de los tiburones y en 1999 logró que los países adoptaran un Plan de Acción Internacional para la Conservación y Ordenación de los Tiburones, que establece que los países que pescan tiburones deben elaborar programas nacionales para la conservación y gestión de los mismos.
Hasta el momento 18 de las 26 principales naciones del mundo que pescan tiburones tienen un plan nacional sobre tiburones y 5 más están en proceso de desarrollarlo.