Diario Co Latino 134 años comprometido con usted
Artículos relacionados
Bogotá/AAFP
El líder de las FARC-EP, Timoleón Jiménez, anunció hoy que esa guerrilla colombiana celebrará los 53 años de su fundación con un conversatorio sobre el proceso de paz en uno de los sitios donde está concentrada para desarmarse.
Mediante su cuenta en Twitter el comandante de ese movimiento informó que la conmemoración será el próximo 27 de mayo en una zona de transición ubicada en el sureño departamento de Nariño; allí los antiguos combatientes deberán abandonar el armamento en su poder y prepararse con vistas a su reintegración en la vida civil.
Abriendo caminos hacia la paz será el nombre del encuentro popular y conversatorio, comentó Jiménez en esa red social.
El pasado 24 de noviembre el máximo dirigente de dicha organización insurgente y el presidente Juan Manuel Santos firmaron el tratado definitivo encaminado a terminar los enfrentamientos y hostilidades luego de medio siglo de conflicto.
Actualmente unos siete mil miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) permanecen acampados en 26 lugares del territorio nacional.
El anuncio sobre las celebraciones ocurre a pocos días de que la Corte Constitucional diera vía libre a la modificación en el Parlamento de los pactos suscritos por ambas partes sin necesidad de un aval del Gobierno, sentencia calificada de grave por esa agrupación.
Según las FARC-EP dicho fallo podría retardar la aplicación de lo consensuado de por sí lenta debido a los atrasos gubernamentales en la habilitación de los campamentos para los guerrilleros en las zonas y puntos transitorios (menores que las primeras).
El Ejecutivo cumple demasiado lentamente su palabra en el proceso de implementación de los acuerdos de paz, los otros poderes titubean o actúan de modo sospechoso en relación con lo pactado, advirtió Jiménez en una carta enviada al mandatario.
Además del cese el fuego bilateral, ya vigente, considerado el mayor logro hasta la fecha de las negociaciones desarrolladas en Cuba, el histórico tratado incluye entre sus medidas la dejación de armas con supervisión de Naciones Unidas.
Asimismo propone una reforma del campo colombiano, asociada a la sustitución voluntaria de los cultivos de uso ilícito por otros plantíos, al igual que la creación de tribunales para sancionar a los responsables de la confrontación con premisas como cero impunidad frente a crímenes de lesa humanidad pero sí beneficios de indultos y amnistías en caso de delitos políticos y conexos.
Aunque el Congreso ha tramitado y expedido ya sustanciales leyes sobre los mencionados convenios, restan otras igualmente claves como las relacionadas con la transformación de las zonas rurales.
La lucha por una distribución equitativa de la tierra y mayores oportunidades para quienes la cultivan constituye una de las raíces profundas de la contienda, que ha dejado casi ocho millones de víctimas, entre ellas 300 mil muertos.
De origen campesino, las FARC-EP surgieron en la localidad de Marquetalia el 27 de mayo de 1964.
