La Habana/PL
La guerrilla colombiana reiteró que el proceso de paz en el país suramericano no significa sometimiento, sick sino un diálogo entre partes iguales que tienen visiones propias y las mismas deben estar armonizadas.
No puede confundirse con soberbia la precisión necesaria de que este es un proceso de paz y no un juicio contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia -Ejército del Pueblo (FARC-EP), subrayó un comunicado divulgado por el jefe de la delegación de la insurgencia, Iván Márquez, en esta capital.
No hemos venido a La Habana a negociar impunidades ni a agachar la cabeza frente al derecho penal del enemigo, sino a construir fórmulas consensuadas que nos conduzcan a una paz justa y duradera basada en el reconocimiento de las víctimas y que allane el camino de la reconciliación, puntualizó.
Por eso cuando hablamos de dejación de las armas, nos referimos a su no utilización en política, compromiso que debe rubricarse tanto por la guerrilla como por el Estado, enfatizó el comunicado de las FARC-EP.
Los mecanismos para hacer realidad la colocación de las armas lejos de su uso, de tal manera que se asegure la lucha política limpia y democrática, son los que estamos intentando convenir en la mesa de conversaciones, manifestó Márquez.
No se trata de imponer caprichos, sino de adoptar, apoyados en el sentido común, un convenio razonable que nos permita lograr ese objetivo, insistió.
Iniciamos este nuevo ciclo con la convicción de que el proceso debe redoblar su marcha indefectible hacia el fin del conflicto
El entendimiento avanza también en el terreno del cese al fuego y de hostilidades, bilateral y definitivo, en la subcomisión técnica integrada por cinco generales y un almirante, y por comandantes del Secretariado y del Estado Mayor Central de las FARC-EP.
Al tiempo -prosiguió Márquez- hemos comenzado el estudio sobre el esclarecimiento y desmonte del fenómeno del paramilitarismo, que no podrá quedar gravitando como amenaza de guerra sucia sobre el firmamento del post acuerdo.
Reiteramos que en La Habana no conocemos el contenido del proyecto de Acto Legislativo que según la prensa se estaría socializando en el Congreso.
Resulta inconveniente -señaló- resolver de manera unilateral uno de los asuntos que aún no aborda la mesa de conversaciones, como es el de la Refrendación, contenida en el punto sexto de la Agenda.
Urge para el éxito de este proceso, superar cuanto antes las desavenencias entre Colombia y Venezuela, dos repúblicas hermanas, concluyó Márquez.
Reinicia diálogo
Las delegaciones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y del gobierno retoman hoy en esta capital las conversaciones para alcanzar la paz en esa nación suramericana.
En un comunicado divulgado aquí al cierre del ciclo pasado, las FARC-EP expresó que entregaba un parte positivo a la nación, pues se registraron avances durante las pláticas.
El proceso -señaló el texto- se mueve en dirección al acuerdo final por lo que llegó el momento en que las partes deben aguzar el sentido común para abrirle espacio al entendimiento y al consenso.
Con satisfacción la guerrilla informó también que la labor de limpieza y descontaminación de artefactos explosivos se reinició en el Departamento de Antioquia.
La insurgencia insistió en la necesidad de actuar en consecuencia con la tregua unilateral declarada por las FARC-EP el pasado 20 de julio.
Con anterioridad, la guerrilla colombiana expresó que la construcción de la paz no admite improvisación alguna.
Nos enteramos que el gobierno y algunos sectores políticos del Congreso de la República, sin el concurso de las FARC-EP, vienen adelantando iniciativas de manera caprichosa.
Queremos manifestarle con toda claridad al pueblo de Colombia, que ninguna de las iniciativas que se lleven a las Cámaras por el Gobierno de forma unilateral, es vinculante para las FARC-EP si previamente no han sido consensuadas en la Mesa de Diálogos, insistió la insurgencia.
Toda iniciativa por fuera de la agenda pactada o de los acuerdos ya alcanzados, constituirían la mejor fórmula para echar por la borda, anticipadamente, el trabajo realizado de mutuo acuerdo por ambas partes en la Mesa y la seguridad jurídica que se le pretende garantizar al país y a quienes hoy tratan de dejar atrás el conflicto interno, advirtió las FARC-EP.
Pedimos que no se borre con el codo lo que se viene escribiendo con la mano, estando la paz tan cerca, añadió la guerrilla.
Debe estar conectado para enviar un comentario.