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@AlmaCoLatino
Con la leyenda de la pancarta “Masacre nunca más”, healing los feligreses que acuden a la misa en la Cripta de Catedral Metropolitana pidieron justicia para con las víctimas de la masacre El Calabozo, online hecho ocurrido hace 32 años.
La celebración eucarística de ayer tuvo la intención especial de recordar a los 200 campesinos asesinados por soldados de la Fuerza Armada, stuff en San Esteban Catarina, San Vicente, en 1982.
A la vez, clamaron porque este hecho se esclarezca, ya que después de muchos años los familiares continúan esperando las explicaciones de lo que realmente ocurrió en esa injusta barbarie contra personas inocentes.
Las víctimas fueron asesinadas a balazos y machetazos, según recopilación de datos y testimonios de personas que lograron huir de esta barbarie, a partir del 17 de agosto de 1982, en los municipios de San Esteban Catarina, Santo Domingo, San Sebastián, Santa Clara y San Lorenzo, el ejército desplegó uno de los mayores operativos militares en esa región, en el que participaron aproximadamente 4 mil soldados.
Esta operación contrainsurgente se denominó “Teniente Coronel Mario Azenón Palma” y participaron algunos de los batallones élites de reacción inmediata como el Atlacatl, Ramón Belloso y Atonal, así como tropas del destacamento militar Número 2 y la Quinta Brigada de Infantería, entre otros.
El 22 de agosto de 1982, en horas de la mañana, soldados del Batallón Atlacatl, alcanzaron a un grupo de numerosos civiles en las riberas del río Amatitán, específicamente en el punto conocido como El Calabozo y ahí asesinaron a las más de 200 personas con lujo de barbarie y luego quemaron decenas de cadáveres.
Entre tanto, durante la celebración también se recordó el legado y enseñanza de Monseñor Romero, por lo que al momento de la procesión de ofrenda los miembros de la Comunidad Monseñor Romero de la Cripta de Catedral presentaron el rostro del obispo mártir como símbolo de quien estuvo fiel al pueblo salvadoreño y lo defendió aun con su propia vida.
Asimismo, de una forma especial se pidió porque el legado pastoral de Monseñor Romero continúe enmarcado en la realidad de la gente más sufrida y pobre, y no se contamine de una espiritualidad diferente, basada en los propios intereses.
