Rolando Alvarenga
@Bachiboxx55
Haciendo de tripas corazón, María Fernanda Vargas y Kathya Vásquez hicieron la proeza de clasificar al torneo de Voleibol de Playa de los Juegos Panamericanos Lima 2019.
De esta forma, la dupla salvadoreña debutará en Juegos Panamericanos en donde hace varios años brillaron con luz propia Laura Molina e Ivonne Soler.
– ¿Cómo se siente por haber logrado el boleto a los Juegos Panamericanos?
Para nosotras (junto a Kathya) es un logro muy grande; sobre todo, porque mantener el ranking NORCECA de Voleibol de Playa no era fácil. Lo anterior porque nosotros no traíamos puntaje de 2017 y eso nos preocupaba mucho, ya que era la base para optar al boleto a Lima. Ahora estamos muy contentas porque serán nuestros primeros Juegos Panamericanos. Siempre es gratificante poder representar a El Salvador en diferentes competencias internacionales y dejar en alto a nuestro pulgarcito.
– ¿Cuál fue la parte más difícil en la búsqueda del boleto a Lima 2019?
Retomar el ritmo de juego en las últimas tres fechas que participamos, ya que en el NORCECA las competencias fueron intensas debido al número de parejas y una fecha completa debe jugarse en tres días. De tal manera, hay que jugar tres partidos diarios, terminando en horas de la noche, y al siguiente día empezar a jugar bien temprano. Fue difícil y muy cansado para el cuerpo, sobre todo cuando se ha perdido el ritmo de juego. Mentalmente también es difícil cuando enfrentamos a equipos con los que el nivel es parejo, sabiendo que hay que darlo todo en cada juego.
– ¿Cómo recibieron la noticia del patrocinio de la empresa hidroeléctrica?
Honestamente, no lo podíamos creer. Es más, aún nos sorprende todo el apoyo que el Grupo CEL nos está dando. Nosotras comenzamos pidiendo lo mínimo para poder competir y CEL nos ha dado muchísimo más. Por ejemplo, los viajes suelen ser largos y nos toca dormir en aeropuertos. Por lo tanto, hay que gastar en comida y transporte extra, gastos que generalmente salían de nuestros bolsillos. Jamás habíamos recibido viáticos y ahora Grupo CEL nos apoya hasta con eso. Estamos agradecidas con el arquitecto David López, presidente del Grupo CEL, por confiar en nosotras.
– ¿Pensó en algún momento que no recibirían apoyo para el circuito NORCECA?
Sí, después de los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018, ambas perdimos un poco la motivación, porque los resultados no fueron lo que esperábamos. Además, sabíamos que al volver al país no tendríamos apoyo económico, ni entrenador, ni un proceso deportivo concreto como debería ser. Incluso, ambas pensamos en dejar de jugar. Pero como todo atleta salvadoreño, sacrificamos muchas cosas, familia, amigos, estudio y tiempo libre.