El piloto español, de gran carrera en la Fórmula 1, participará la próxima temporada en el IndyCar.
Los Angeles/Estados Unidos/AFP
El español Fernando Alonso, que dejará la Fórmula 1 al final de la temporada, calificó su sesión de prueba al volante de un monoplaza de la escudería Andretti de la IndyCar como un “día positivo”, aunque no avanzó si planea incorporarse al campeonato en 2019.
“Fue un buen día, un día divertido, me gusta probar autos nuevos, y probar en la Fórmula Indy en un circuito de carretera es especial”, dijo el doble campeón mundial de F1 a los organizadores del Campeonato IndyCar. “Tuve la oportunidad de conducir en pista mojada, intermedia y seca. Me sentí bien en todas las condiciones de pista, el clima fue favorable para nosotros, con un poco de viento en la tarde, pero fue un día positivo”, agregó.
Las pruebas se llevaron a cabo en el Barber Motorsports Park, Alabama, donde el aún piloto de McLaren se reencontró con los mandos y mecánicos de Andretti tras competir con el equipo en las 500 Millas de Indianápolis en 2017 en una pista ovalada, su única experiencia en IndyCar hasta el momento.
“Instintivamente, una pista es mejor para mí, porque eso es a lo que me he acostumbrado durante toda mi carrera, pero las 500 Millas de Indianápolis fueron una experiencia increíble, es 50/50 “entre los dos tipos de ruta”, agregó el asturiano.
Alonso, de 37 años, no dio ninguna indicación de sus intenciones al final de su carrera en la F1, donde no ha ganado un Gran Premio desde desde 2013.
Vencedor de las 24 Horas de Le Mans en junio con Toyota, con quien está compitiendo en la temporada de resistencia 2018-2019, y doble ganador del GP de Mónaco (2006, 2007), el español podría lograr una hazaña excepcional en el automovilismo en caso de conquistar la “Triple Corona”.
Una victoria en Indianápolis el próximo mes de mayo le permitiría unirse al inglés Graham Hill como uno de los pilotos más completos en la historia del automovilismo, pues el británico fue el único en ganar tres eventos de prestigio como Le Mans, Indianápolis y Mónaco.
En su primera participación en las 500 Millas en 2017, Alonso se vio obligado a retirarse con una rotura mecánica a 21 vueltas de la meta mientras lideraba la carrera.