Alma Vilches
@AlmaCoLatino
Ante la reciente ratificación por parte de la Asamblea Legislativa de la reforma del artículo 248 de la Constitución de la República, la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD) mostró su preocupación, porque, permite que una misma legislatura proponga y ratifique enmiendas constitucionales, con una mayoría calificada de tres cuartas partes de los diputados electos.
Para FESPAD, la reforma del artículo 248 de la Constitución abre la puerta a la arbitrariedad, busca fortalecer el poder absoluto y representa menos control popular en las actuaciones del Estado
“FESPAD rechaza la reforma constitucional porque altera el mecanismo de reforma establecido actualmente y, por ende, resta poder a la población electora. Esta modificación podría abrir la puerta a cambios que afecten derechos y garantías fundamentales, profundizando el debilitamiento de principios esenciales del Estado de derecho y la protección de los derechos humanos”, externó la organización.
El artículo 248 establecía que cualquier reforma a la Constitución debía ser acordada por una Asamblea Legislativa y ratificada por la siguiente, promoviendo un proceso deliberativo que garantizaba el debate público y la participación ciudadana en asuntos de interés nacional.
De esta forma se buscaba asegurar que las reformas constitucionales fueran producto de una reflexión profunda y de un consenso amplio, evitando cambios apresurados que pudieran vulnerar la estabilidad democrática del país.
La nueva reforma, al permitir que una sola legislatura apruebe y ratifique enmiendas constitucionales, elimina la posibilidad de generar un debate público con participación ciudadana y se manifieste en elecciones entre una composición legislativa que aprueba y otra ratifique una reforma constitucional.
Esta concentración de poder en una única legislatura podría facilitar la aprobación de reformas que respondan a intereses coyunturales o partidarios, sin el debido escrutinio popular.
“Que una sola legislatura apruebe y ratifique reformas constitucionales es banalizar la ley máxima del Estado, es someterla a las veleidades del poder total, para fortalecerlo en detrimento de los derechos del pueblo, de la institucionalidad del Estado y del anhelo democrático”, aseguró la organización.
FESPAD reiteró su compromiso con la defensa del Estado de derecho, la democracia y los derechos humanos, continuará vigilantes ante cualquier acción que pueda vulnerar estos pilares fundamentales de la sociedad.
Asimismo, hizo un llamado a la Asamblea Legislativa y a todos los actores políticos a reconsiderar esta reforma y a promover mecanismos que fortalezcan la participación ciudadana, el debate público y la transparencia en el proceso de reformas constitucionales.