@JoakinSalazar
Tras la resolución del Tribunal de Sentencia de Sonsonate, drugstore en el que dictaminó la absolución de seis militares acusados de la privación de libertad y desaparición forzada de tres jóvenes en el municipio de Armenia, search la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD) y la Asociación Salvadoreña de Derechos Humanos (ASDEHU) presentaron un recurso de apelación de la sentencia.
La apelación responde a que la resolución del Tribunal, afecta a las víctimas directas y sus familiares que se les ha negado el acceso a la justicia, generando una sentencia injusta por absolver a los militares.
De acuerdo al reporte judicial, los jóvenes fueron vistos por última vez con los militares, hecho sucedido el 18 de febrero de 2014. Hasta el momento, se desconoce el paradero de los jóvenes.
Los militares involucrados en los hechos son: el sargento Santos Manuel Coreto y los soldados Ronald Pozo, José Santamaría, Arely Esquina, Juan Ovidio Santiago García y Manuel de Jesús Santos Chávez.
A ellos, la Fiscalía los señaló que los soldados son los autores de la privación de la libertad de dos jóvenes que lograron escapar y la desaparición forzada de Francisco Javier Hernández Gómez, de 20 años; Óscar Oswaldo Leiva Mejía, de 23; y Fernando José Choto, de 22. El Juzgador determinó en el fallo, emitido el pasado tres de noviembre, que los militares debían ser absueltos de los delitos que se les imputa, debido a que no se logró establecer que las víctimas fueran privadas de libertad, puesto que no estuvieron obligadas, forzadas ni retenidas por los militares, quienes reportaron a la base militar que por espacio de 30-45 minutos intervinieron a los jóvenes para pedirles sus documentos generales, sin detenerlos ni esposarlos.
Para FESPAD y ASDEHU la jueza del Tribunal de Sentencia, Gilda Cabañas, no utilizó el sentido común las reglas de la lógica y de la psicologia, tal como lo exige la Ley.
Y es que a juicio de la juzgadora los jovenes debieron haber desobedecido las órdenes de los soldados y resistirse al procedimiento de captura, para ella “los jóvenes nunca fueron golpeados, no fueron amarrados y no fueron encerados en un lugar”.
Abraham Ábrego, director de FESPAD, considera que la sentencia es incoherente y revictimiza alas personas afectadas por los delitos.
“Creemos que es una sentencia bastante dudosa, por el razonamiento que hace la jueza, incluso, llega a plantear una tesis que los hechos son irrelevantes, sin tener en cuenta que se habla de tres jóvenes que a la fecha no han aparecido”, comentó Ábrego.El recurso de apelación fue presentado el pasado lunes, donde los abogados de la querella del caso esperan que se rectifique el resultado y se haga un proceso justo contra los militares.
Finalmente, las organizaciones de la querella solicitan a la Corte Suprema de Justicia que realice una auditoria formal para el juicio, donde se deduzcan responsabilidadades sobre un supuesto beneficio para los imputados.