Alexander Pineda
@DiarioCoLatino
La Fiscalía General de la República inició ayer las investigaciones sobre las presuntas negociaciones que el Gobierno de Nayib Bukele ha entablado con la MS-13 desde el inicio de su gestión presidencial.
La tarde de este lunes, personal de la FGR ejecutó registros con prevención de allanamiento en la sede de la Dirección General de Centros Penales y en los centros penitenciarios de Izalco y Zacatecoluca.
Este jueves 3 de septiembre, trascendió debido a una investigación periodística de El Faro, que funcionarios de Gobierno han mantenido no menos de una decena de reuniones con cabecillas de pandillas recluidos en penales de máxima seguridad.
Según narra el artículo periodístico, a los funcionarios los acompañaban sujetos encapuchados que no se identificaron ante el control de ingreso a los penales, se presume que podrían ser líderes de pandillas aún en libertad.
La investigación de El Faro se basó en documentos oficiales de registro de la Dirección General de Centros Penales en los que se menciona al director general, Osiris Luna Meza y a Carlos Marroquín, director de Reconstrucción del Tejido Social, dependencia creada por el gobierno adscrita al ministerio de Gobernación, como representantes del Gobierno en las presuntas negociaciones.
Apoyo electoral
La investigación periodística revela que el descenso de la violencia homicida atribuida a las pandillas se debe a una orden emanada de los cabecillas, estos instan a los pandilleros en libertad a mantenerse “calmados” y confirman estos, en escritos (wilas) interceptados por inteligencia penitenciaria, que hay diálogo con el Gobierno.
También establece que el Gobierno se habría comprometido a mejorar las condiciones carcelarias a pandilleros a cambio de apoyo en las elecciones legislativas y municipales de febrero del año próximo.
La medida de juntar miembros de distintas pandillas en las mismas celdas establecida en abril pasado, también habría sido dejada sin efecto por orden de las autoridades penitenciarias.