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Samuel Amaya
@SamuelAmaya98
Dina Argueta y Anabel Belloso, diputadas del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) presentaron en la Asamblea Legislativa una solicitud para que se emita un pronunciamiento por la beatificación del padre Rutilio Grande, sus colaboradores Manuel Solórzano y Nelson Lemus, y por el Fray Cosme Spessotto.
El padre Rutilio Grande fue asesinado el 12 de marzo de 1977, en El Paisnal, San Salvador, “por la decisión de asumir la opción preferencial de los pobres en esos años que El Salvador enfrentaba una situación de persecución y represión contra toda persona que el régimen consideraba sus opositores políticos, por el hecho de denunciar las injusticas”, destacaron las legisladoras en la iniciativa.
Luego de 45 años de su asesinato, las efemelenistas dijeron estar alegres la beatificación como un paso necesario para la canonización. “Para el pueblo salvadoreño, el padre Rutilio Grande siempre ha sido considerado un profeta que ofrendó su vida por los pobres”, destacaron.
También, el 22 de enero será beatificado el padre Cosme Spessotto, de la congregación franciscana, radicado en El Salvador, y que predicó el evangelio en San Juan Nonualco, en La Paz, durante los últimos 27 años de vida.
El padre Spessotto denunció los atropellos contra la población y apoyó a las víctimas consciente del riesgo que representaba para su vida. Fue así como un 14 de junio de 1980 las balas lo callaron.
Dina Argueta sostuvo que la beatificación debe de significar “una esperanza en las luchas del país que busca las transformaciones sociales. Es un mensaje además, en la firma de los Acuerdos de Paz que significaron un antes y un después en la historia de El Salvador”.
Mientras que Anabel Belloso sostuvo que la beatificación, “es una lucha que emprendió la feligresía católica desde el martirio de estos padres y catequistas en el marco del conflicto armado como víctimas de aquel momento de represión”.
Las parlamentarias piden que la iniciativa sea aprobada por los demás diputados, quienes días atrás, aprobaron que el próximo 22 de enero la capital de El Salvador sea San Juan Nonualco por el padre Cosme Spessotto, y por el padre Rutilio Grande, el 23 de enero Aguilares sería capital de El Salvador, según el dictamen de la Comisión de Cultura que será ratificado por el pleno en los próximos días.
La feligresía católica celebrará la beatificación el próximo sábado 22 de enero, tendrá lugar en la Plaza Salvador del Mundo con unos 6 mil invitados según información de la iglesia.
Por el momento, ya se arma el templete. La misa será precedida por el cardenal Gregorio Rosa Chávez.
