Francisco Elías Valencia
Alma Vilches
@DiarioCoLatino
El Foro de Sao Paulo es un grupo que aglutina a partidos progresistas de América Latina y el Caribe y también a movimientos de izquierda. Varios de esos partidos son hoy Gobierno, como el FMLN. Estos movimientos revolucionarios y partidos políticos tienen la plena conciencia que para lograr una nueva sociedad urge derrotar el capitalismo y su modelo neoliberal.
Este espacio de debates se fundó en julio de 1990, fruto de una iniciativa del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro.
Asier Altuna Epelde, representante para América de Sortu, un partido de izquierda del País Vasco, conversó con Diario Co Latino y dijo que este Foro debe ser aprovechado por los partidos de izquierda de América Latina para reactivarse y aplicar ese internacionalismo a nivel regional a fin de ayudarse entre partidos.
– ¿Que significa Sortu?
Sortu significa nacer, surgir o crear, es un partido político español cuyo ámbito de actuación son las comunidades autónomas del País Vasco. El objetivo es cambiar la actual Europa basada en intereses capitalistas y hacerla mucho más humana.
– ¿Sortu es gobierno en algunos lugares del país Vasco?
Está en coalición con otros cuatro partidos.
– ¿En qué año surgió Sortu?
Estuvo 10 años sin legalizar, se legalizó en 2012.
-¿Sortu permanece como observador en Foro de Sao Paulo?
Venimos en calidad de invitados, en el Foro de Sao Paulo solo pueden participar activamente los partidos de izquierda de América Latina, estamos como invitados, este foro da la posibilidad cada año de poder participar y estar en los debates.
– A partir de la experiencia que han tenido en el Foro de Sao Paulo, ¿cuál ha sido su valoración?
La primera vez que participé en Nicaragua, en 2011, eran muy diferentes a la situación actual, se vivían las elecciones donde Daniel Ortega competía, el Foro tenía muy buena imagen a nivel de continente, eso se aprovechó para dar un impulso.
Por lo menos en los últimos cinco años se han tenido dos etapas, después de la muerte de Hugo Chávez los partidos miembros del Foro están a la defensiva con todo el ataque de la derecha.
Este año se pretende relanzar el Foro y aprovechar ese encuentro de partidos de izquierda de América Latina y sacar ese músculo otra vez y aplicar ese internacionalismo a nivel regional de ayudarse entre partidos.
– El foro nace justo en el momento que la derecha mundial se jactaba de la caída del mundo socialista, como un esfuerzo para contrarrestar el neoliberalismo, ¿considera usted que se ha logrado eso?
Creo que sí, una de las claves del Foro es que desde el principio de los 90´s ha creado esa alianza, cuando el neoliberalismo era amo de América Latina, cuando se dio ese cambio de gobierno en 1998 en Venezuela, ya había una red de confianza entre partidos, que ha posibilitado ese movimiento popular, esa unión de fuerza ha podido darse esa época de cambios desde principios del siglo XXI.
En estos años se han dado grandes avances, la derecha se ha recolocado en el escenario, Estados Unidos se ha ubicado otra vez, en el año 2000 apostaron por Irak y por otros frentes, el patio trasero como ellos le llamaban se ha reubicado.
En América Latina la derecha está en una ofensiva, el Foro lo que busca es revertir esa situación, intentar salir a la calle y recuperar ese músculo que se ha perdido cuando los partidos de izquierda han llegado al gobierno, los movimientos han tenido un desinfle o desánimo.
-Ese desánimo de los movimientos o grupos sociales de los partidos de izquierda cuando llegan al gobierno, ¿es natural o algo ha pasado?
En parte es natural, que si luchó tanto, cuando se llega al poder el partido ahora está para servir. En Brasil, ante un golpe de Estado el Partido de los Trabajadores (PT) ha sido capaz de hacer una autocrítica seria y bajar a los movimientos populares, para crear el Frente Popular y seguir caminando con la estrategia que lo llevó al poder, al gestionar las cuotas de poder se ha separado de ese movimiento, las políticas que ha llevado el PT en muchas ocasiones no han coincidido con el movimiento popular, ha habido fricciones.
-Obviamente Brasil es el referente que la derecha no se ha quedado quieta, ¿el Foro de Sao Paulo está preparado para enfrentar esa derecha?
Eso es lo que se va a debatir estos días, al final la ofensiva que venía de antes, se ha materializado con el cambio de gobierno en Argentina y la pérdida de las últimas elecciones en Venezuela, la revocatoria en el referéndum de Bolivia.
Desde noviembre ha existido un cambio en esa tendencia que los gobiernos progresistas ganaban, parecía que el pueblo lo aprobaba también, se ha logrado marcar ese cambio de tendencia que ha hecho que lo gobiernos también se pongan un poco a la defensiva.
El golpe más severo es el de Bolivia, porque nadie pensaba que Evo Morales pudiera perder el referéndum, ahí queda la duda que con un gobierno, con un movimiento popular tan fuerte, cómo podía perder el referéndum.
Es un golpe de atención para activar nuevamente. Los propios movimientos del Alba están debatiendo, este Foro dará pié en ese sentido para transcurrir en el camino correcto, para recuperar nuevamente la calle, aunque la ofensiva de la derecha viene impulsada y orquestada por Estado Unidos.
– ¿Cuáles son las expectativas desde Europa, con este tipo de esfuerzos como el Foro de Sao Paulo?
Es importante analizar los principios desde los 90´s cuando se tenía poca cosa, cuando se empieza a crear un movimiento que da la posibilidad de trabajar, al final todos se conocen, los partidos entre sí saben cuáles son los límites de cada uno; hay un trabajo en conjunto, esa es la línea que permite seguir avanzando, es lo que en Europa no hay, allá los partidos comunistas van por un lado, están los partidos de la izquierda nórdica, está todo disperso, no hay un liderazgo que pueda articular todo ese movimiento social. En Europa no hay un referente de Foro de Sao Paulo, sí ha hecho falta, la izquierda todavía no cree que es una alternativa en Europa y eso está dando pie a que la extrema derecha se apropie de las reivindicaciones históricas de la izquierda y ocupe esos escenarios.
-¿Por qué los movimientos sociales se han dejado quitar las banderas por parte de la derecha?
Al menos en Europa la izquierda ha dejado de luchar por el poder, se han dedicado a conseguir más diputados y curules, a fin de gestionar lo poco que tenían y sin ningún horizonte claro de como ganar, eso falta en Europa, la ambición de ganar.
La derecha aprende de las experiencias de otros países. La Unión Europea tenía muy claro que no se podía permitir una inclusión como la que se ha tenido en América Latina desde que comenzó el cambio en Venezuela.
Si hubiésemos tenido un Foro de Sao Paulo en Europa trabajando desde años, se tuviera más claro y definido cómo ayudarse entre nosotros.
Llevamos años diciendo que se debe hacer algo para unir a todas las izquierdas, tener un mínimo común para todos, articular ese movimiento. La izquierda en Europa está totalmente dividida, tiene que ser el movimiento popular el que empiece a articular todo eso y que ponga los primeros miembros de la unión e incorporación de partidos, donde haya una alternativa.
– Este XXII Foro está ceñido en el poder popular, ¿significa que este poder se había abandonado o solamente hay que darle nuevos brillos?
Por parte de algunos gobiernos han desatendido estos movimientos y otros que necesitan un nuevo impulso.
Por parte de algunos gobiernos si ha habido ese error de desatender o de marcar las diferencias con el movimiento porque ya está jugando en el otro escenario y hay que contentar a la burguesía y a todos los sectores, quiérase o no se está dejando a los que le han llevado al poder
El Foro permite marcar una estrategia, una dirección por donde transcurrir los movimientos y los partidos en América Latina. A nivel ideológico y político aquí se ha avanzado mucho, y la izquierda está muy bien posicionada, el movimiento popular puede ser un sostén muy importante para estos gobiernos progresistas y para los que juegan a la oposición. El Foro está necesitado de esa reflexión.
-¿Considera usted que es momento para que el Foro enseñe a otros continentes o para seguir aprendiendo de la misma realidad y los propios errores?
En el Foro cada vez participan más partidos. Vienen de Asia, Vietnam, China, Europa, de diferentes lugares, donde cada uno aprende mucho más.
En el Foro se aprende de cada experiencia, al final se da un pequeño internacionalismo, lo que tendría que ser a nivel mundial, al menos en América Latina ya lo hay.
Se aprende los unos, de los otros, el problema es que en Europa no se tiene gestión de gobiernos progresistas que puedan hacer alianzas con acuerdos como el Alba, donde se visualice a Europa que el comercio y mercado se puede gestionar de otra forma.
Lo que ve la sociedad Europea es que hay una única forma de ver el comercio y eso es el neoliberalismo y los tratados de libre comercio, no se es capaz de ver más allá porque no se tiene esas experiencias, sin embargo, las experiencias que pueden llevar los partidos son muy limitadas, porque no hay forma de dar a conocer esas estrategias de gestión.
– ¿Qué estrategias se pueden implementar desde el Foro para debilitar el neoliberalismo?
Las experiencias de cada país que pueden servir para nuevos escenarios que puedan abrirse, el trabajo conjunto entre los partidos, movimientos y sindicatos. Así como el eje económico que es cambiante, debe actualizarse y ver a hacia dónde se dirigen las políticas neoliberales y anteponerse a esos escenarios, eso requiere de encuentros como el Foro para hacer análisis, intercambiar experiencias, ya con los datos ver hacia dónde va la sociedad y hacerla diferente.
– ¿Qué mensaje le puede dar al FMLN, dado que se convierte en la capital de la izquierda Latinoamérica?
El mensaje de siempre es de respeto, de la solidaridad, por tantos vínculos existentes entre el Frente y la lucha de izquierda independentista, de ve esos lazos de amistad que siempre hay.