París/dpa
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el primer ministro Edouard Philippe anunciarán un nuevo Gobierno este miércoles tras la clara victoria obtenida en las elecciones parlamentarias, informó hoy el Palacio del Elíseo.
En línea con la tradición francesa tras las elecciones parlamentarias, Philippe, elegido el mes pasado por Macron, presentó su renuncia al Gobierno. El presidente volvió a nombrarlo luego y le pidió que forme un nuevo Gobierno, indicó un comunicado oficial.
Previamente, el portavoz de Gobierno Christophe Castaner había anunciado que serán cambios más bien técnicos y en pequeña escala, y que está confirmado que el primer ministro Philippe seguirá en su puesto.
Sin embargo, medios franceses han informado que un importante aliado de Macron, el ministro de Cohesión Territorial, Richard Ferrand, dejaría el Gobierno para liderar el grupo progubernamental en la nueva Asamblea Nacional.
Ferrand se ha visto envuelto en un escándalo por presuntamente haber utilizado su posición de poder para beneficiar a familiares. La fiscalía ha abierto una investigación y aunque aún no se sabe en qué derivará, el tema es escabroso porque Macron se comprometió a acabar con las prácticas turbias en la vida pública.
Benjamin Griveaux, el portavoz del partido de Macron La Republica en Marcha, dijo al canal BFMTV que no se trata de un castigo.
«Está lejos de un castigo porque la posición más estratégica en la Asamblea Nacional será el de presidente de La República en Marcha», afirmó Griveaux.
El partido de Macron y sus aliados sumarán 350 de las 577 bancas en la Asamblea Nacional, de acuerdo con las cifras finales del Ministerio del Interior.
Los ministros del Ejecutivo ganaron todos en sus respectivos distritos, tal como les había puesto como condición Macron para seguir en sus puestos, entre ellos los titulares de Economía, Bruno Le Maire, y de Europa, Marielle de Sarnez.
El partido de centro-derecha Los Republicanos y sus aliados suman 137 escaños, mientras que el Partido Socialista del antecesor de Macron, François Hollande, se hunde hasta los 45 diputados incluidos sus aliados de centro-izquierda.
El partido izquierdista La Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon suma 17 legisladores, suficientes como para tener un grupo parlamentario propio, mientras que el Partido Comunista tendrá 10.
Por su parte, el ultraderechista Frente Nacional consiguió ocho diputados pese a tener un 13 por ciento de apoyo en las elecciones del pasado domingo. Son seis más que hasta ahora, pero no suficientes para tener una fracción propia (un mínimo de 15) por lo que la agrupación de Marine Le Pen tendrá derechos limitados de palabra e influencia en la agenda parlamentaria.
La dirigente, derrotada por Macron en la segunda vuelta de las presidenciales, entrará por primera vez en la Asamblea Nacional.