Estambul/dpa
Las Fuerzas Armadas turcas aseguraron hoy que asumieron el poder en el país, según un comunicado publicado por la agencia de noticias Dogan, mientras que las autoridades políticas negaron que se haya concretado un golpe de Estado.
En el comunicado, los militares indicaron que el objetivo es restablecer el orden constitucional, la democracia y los derechos humanos.
Un funcionario de la oficina del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo que «un grupo dentro de las Fuerzas Armadas llevó adelante un intento por derrocar al Gobierno democráticamente electo».
Según el funcionario, Erdogan sigue en el poder. Además dijo que el comunicado de los militares no fue autorizado por la cúpula de las fuerzas.
Previamente, el primer ministro turco, Binali Yildirim, dijo a la televisión que hubo un «intento» de controlar el poder de parte de los militares, pero negó que se tratara de un golpe.
«No permitiremos este intento», dijo Yildirim, que aseguró que los responsables «pagarán el más alto precio».
La agencia de noticias DHA reportó que en Ankara la Policía convocó a todo su personal. Además, en los alrededores de la central del Ejército en la capital se tomaron fuertes medidas de seguridad y frente al edificio había ambulancias estacionadas.
En Estambul, testigos informaron haber visto efectivos de seguridad armados en las calles y helicópteros sobrevolando al ciudad.
En 1997, el Ejército derrocó al Gobierno en un «golpe postmoderno». El último golpe de Estado en Turquía fue en 1980 e incluyó la suspensión de la Constitución.