Moscú/AFP
Fuerzas militares rusas fueron desplegadas a lo largo de dos zonas de distensión en Siria, en el sudoeste del país y en Guta oriental, cerca de Damasco, para supervisar el respeto de la tregua, anunció este lunes el ejército ruso.
«Para asegurar el respeto del alto al fuego, la policía militar rusa desplegó dos puestos de control y 10 de vigilancia» a lo largo de las fronteras de la zona de distensión en el sudoeste de Siria, declaró el general Sergueï Rudskoï, del Estado Mayor ruso, en una conferencia de prensa en Moscú.
Las fuerzas rusas fueron desplegadas el viernes y el sábado pasados en esta zona, que comprende las regiones de Deraa, Qouneitra et Soueida, precisó el general.
Dos otros puestos de control y cuatro de vigilancia fueron desplegados este lunes en Guta oriental, enclave rebelde cercano a Damasco, según la misma fuente.
«Estas medidas permiten que se mantenga el alto al fuego y aseguran el acceso sin restricciones de los cargamentos humanitarios, así como el retorno de refugiados y desplazados», subrayó el general Rudskoï.
Rusia informó «de antemano» a sus contrapartes estadounidenses, jordanos e israelíes sobre el despliegue de sus fuerzas, aseguró.
El alto al fuego en esta zona cercana a las fronteras con Jordania e Israel, negociado entre Rusia y Estados Unidos, entró en vigor el 9 de julio.
La interrupción de los combates en ciertas «zonas» de Guta oriental fue anunciada por el ejercito sirio el 22 de julio, horas después de que Moscú anunciase un acuerdo para proteger este enclave rebelde bajo sitio cerca de Damasco.
A principios de julio, las discusiones multilaterales llevadas a cabo en Astana, en Kazajistán, no habían logrado un acuerdo sobre la protección de estas zonas para mantener un alto al fuego durable en Siria.
Un posible despliegue de fuerzas de paz había sido evocado para cuatro zonas de la regiones de Idleb (noroeste), Homs (centro), Guta oriental y en el sur del país.