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Mirna Jiménez
@DiarioCoLatino
El expresidente de la República, salve Mauricio Funes, advirtió anoche que los procesados por el caso CEL/Enel preparan una demanda en su contra que sería presentada la próxima semana, según información que ha llegado a sus manos, aseguró.
Funes dijo que los acusados, quienes lograron su libertad luego de que los abogados defensores recurrieran a una maniobra legal ante los tribunales, al cambiar el delito, ahora quieren acusarlo por difamación y calumnia ante tribunales internacionales.
Los ocho imputados, varios de ellos con nexos con el partido ARENA, quedaron libres luego que el juez de la causa aprobara el cambio de delito solicitado por la defensa, que pasó de “peculado”, a “peculado culposo” (sin intención), que según la ley ya había prescrito.
“He tenido conocimiento, de círculos cercanos a los eximputados en el caso CEL/Enel que en una especie de desquite por haber hecho públicas algunas irregularidades que de acuerdo a las investigaciones que hizo mi gobierno, la Asamblea Legislativa y Fiscalía, fueron cometidas en la venta de las acciones de LaGeo a la empresa italiana Enel, los implicados ahora sobreseídos, han tomado la decisión de demandarme”, informó Funes durante la transmisión de su programa Sin Censura, emitido anoche en radio La Chévere.
Para el expresidente, es paradógico que quien denuncia presuntos actos de corrupción cometidos contra el Estado corra el peligro de ir a la cárcel por un acto de ese tipo, mientras la impunidad permite que muchos hechos delictivos queden sin castigo.
Resulta paradógico, pero en en nuestro país, quien destapa y denuncia un probable acto de corrupción gobernamental acaba siendo demandado con el riesgo de ir a la cárcel, y quien es acusado formalmente por la Fiscalía, con suficientes evidencias para ser condenado, no solo queda en libertad sino que contra ataca con una demanda por difamación”, dijo el exjefe de Gobierno.
A manera de ilustración, Funes dijo que en El Salvador “los patos le disparan a las escopetas” y que con la decisión judicial a favor de personas con poder imputadas en el caso CEL/Enel, se cumple la frase dicha por el asesinado arzobispo de San Salvador y beato de la Iglesia católica Óscar Arnulfo Romero, que en el país la justicia es como la serpiente que solo muerde al descalzo.
De acuerdo con Funes, el país es un ejemplo claro de “mundo al revés”, donde los casos de corrupción quedan impunes cuando los acusados tienen que ver con sectores del poder oligárquico y los denunciantes corren el riesgo de enfrentar un proceso penal en su contra por atreverse a denunciar.
El exmandatario dijo que si se sigue la lógica de los ex-imputados en el caso, estos tendrían que acusar también de difamación a los exdirectivos de CEL/Enel, que también autorizaron dar el aviso ante la fiscalía general, a los diputados que aprobaron el dictamen de la comisión legislativa que investigó el caso y acordó incriminarlos, y al mismo fiscal general, Luis Martínez y su equipo de abogados “que condujo la investigación y el proceso formal de acusación civil y penal ante los tribunales del país”.
Funes recordó que la Fiscalía General nombró a tres peritos independientes del Gobierno y del FMLN, que investigaron el caso por varias semanas y llegaron a la conclusión de que se debía presentar una acusación formal en los tribunales de justicia contra los funcionarios de CEL y ejecutivos de la empresa Enel, entre quienes figuran el expresidente de la autónoma Guillermo Sol Bang y el exministro de Economía, Miguel Lacayo.
Por otro lado, el exjefe de Gobierno se refirió a las denuncias que la dirigencia del FMLN ha hecho en contra de ARENA a cuya cúpula acusa de planificar acciones desestabilizadoras en contra de la administración del presidente Salvador Sánchez Cerén.
Desestabilización
Funes dijo que la conducta de sectores de derecha no es nueva y ya se generaron acciones desestabilizadoras en el pasado, cuando no han tenido a su disposición el control del Estado.
El exmandatario se refirió a las diferentes estrategias que el partido ARENA y sectores de la derecha oligárquica han estado promoviendo en los últimos días.
Funes recordó que durante los años ochenta, cuando llegó a la presidencia el democristiano José Napoleón Duarte se mantuvo también acciones desestabilizadoras.
Basta recordar el paro empresarial que organizó la derecha oligarquica, para oponerse a un paquete de reforma tributaria que la bancada pedecistas había aprobado semanas atrás”, expresó el exjefe e Estado.
Recordó que promovieron una paralización de dos días de la economía nacional, con el propósito de desestabilizar al gobierno hasta provocar su caída, cuando nunca la empresa privada había llamado a una huelga.
Comentó Funes que en esa ocasión no hubo señales de radio ni televisión, tampoco impresión de periódicos porque el PDC venía respaldando un conjunto de iniciativas que había puesto en riesgo el poder hegemónico de la derecha oligárquica en el país.
El expresidente dijo que el gobierno pedecista había impulsado la reforma agraria, la nacionalización de la banca, del comercio exterior, expropiación de los ingenios azucareros y en 1986 impulsó una reforma tributaria que cobraría a los grandes patrimonios y grandes capitales del país,entre otras cosas.
A la derecha empresarial, no ARENA, porque no existía como partido, no le importó perder ingresos por dos días, pero hace poco que se dio un día de asueto para apoyar una actividad por la paz, la primera queja fue que iban a perder los negocios por estar cerrados un solo día, precisó Funes.
Cuando retoman el control en 1989, con Alfredo Cristiani como presidente de la República, se dedicaron a obtener de nuevo el poder económico que habían perdido.
Esos años de la administración Duarte, solo representaron para ellos un paréntesis, según señaló.
A juicio de Funes las acciones desestabilizadoras vienen desde antes, las enfrentó el país en la segunda mitad de los años ochenta por parte de la derecha oligárquica, y en el 2009 cuando ganó el FMLN, y se incrementan en el actual gobierno de Sánchez Cerén.
