Washington / AFP
El gobierno de Estados Unidos investigará las sospechas de posición dominante y de sesgo intencional de los gigantes de las redes sociales, anunció el Departamento de Justicia.
Una declaración del Departamento de Justicia indicó que el fiscal General Jeff Sessions «convocó a una reunión con varios procuradores generales este mes para discutir la creciente preocupación de que estas compañías puedan estar perjudicando la (libre) competencia y sofocando intencionalmente el libre intercambio de ideas en sus plataformas».
Este anuncio se produce días después de que el presidente Donald Trump acusara a las grandes firmas de tecnología de censurar y reprimir a las voces conservadoras en favor de las opiniones progresistas, alegaciones que las empresas negaron rotundamente.
La breve declaración del Departamento, que se produjo al final de una audiencia en el Senado con altos ejecutivos de las redes sociales Facebook y Twitter, no ofreció pistas sobre si los funcionarios estaban considerando una investigación antimonopolio o alguna forma de acción reguladora.
Analistas de la industria tecnológica dicen que hay poca evidencia de que las firmas de internet estén filtrando contenido por razones políticas, pero que las compañías tendrían protecciones constitucionales contra cualquier esfuerzo gubernamental para regular sus algoritmos.
El martes, el presidente de la agencia reguladora Federal Communications, Ajit Pai, reclamó a las empresas de Silicon Valley que brinden más transparencia sobre cómo operan, lo que aumenta la posibilidad de regulaciones más estrictas para las empresas del ámbito tecnológico.
«Tenemos que pensar seriamente si ha llegado el momento de que estas empresas cumplan con las nuevas obligaciones de transparencia», sostuvo Pai en una publicación de un blog.
Sin embargo, Pai no ofreció ninguna propuesta específica para este asunto, pero pareció hacerse eco de las preocupaciones planteadas por Trump contra las firmas de tecnología.
Trump lanzó la semana pasada una advertencia a las gigantes Google, Facebook y Twitter a «tener cuidado», pero no llegó a amenazar con una regulación.